El torero Diosleguarde: estable dentro de lo crítico

El torero Manuel Diosleguarde, de 23 años, fue víctima de una cornada de 25 centímetros el domingo pasado en la plaza de toros de Cuellar. El asta le perforó la arteria femoral que le dejó en una situación grave. Fue trasladado, inmediatamente, al Hospital Clínico de Valladolid donde todavía continua su recuperación.

Los pronósticos son buenos y el torero ya está consciente. El diestro se despertó a última hora de la tarde del lunes después de pasar todo el día intubado en la Unidad de Reanimación y Cuidados Críticos de Adultos (REA). Su apoderado José Ignacio Cascón y su padre pudieron acompañarle unos minutos.

«Hemos pasado su padre y yo a verlo y nos ha sonreído; el torero es consciente en todo momento de lo ocurrido en la plaza hasta que fue anestesiado en la enfermería de Cuéllar», ha declarado Cascón.

El lunes se le volvió a intervenir en el gemelo derecho para colocar los drenajes y recuperar la zona afectada. Una operación necesaria en este tipo de percances, que se desarrolló con total normalidad.

Manuel Diosleguarde se encontraba realizando su cuarto paseíllo como matador de toros cuando al entrar a matar al sexto toro de la corrida fue cogido por el animal que pertenecía a la ganadería de Cebada Gago.

Entró muy recto con la espada

El torero entró muy recto con la espada y el animal lo prendió de manera certera por el muslo derecho. Lo dejó suspendido en el aire con el pitón dentro durante varios segundos, lo que le causó la rotura de la arteria femoral y la vena safena.