El primer retrato de Maya Picasso sale a subasta tras su muerte y puede alcanzar los 20 millones de euros

En el año Picasso han vuelto a salir a la luz las numerosas mujeres que sufrieron las pasiones del artista malagueño. Él mismo definió los aspectos eróticos de sus obras en relación a las siete mujeres de su vida: Fernande Olivier, Eva Gouel, Olga Khokhlova, Marie-Thérèse Walter, Dora Maar, Françoise Gilot y Jacqueline Roque.

Con Olga Khokhlova Picasso tuvo un hijo, Paulo, pero el maltrato físico y las numerosas infidelidades la alejaron de él, por lo que comenzó un idilio con Marie-Thérèse Walter, de tan solo 17 años cuando él tenía ya 45. Con ella tuvo una hija, Maya, mientras continuaba casado con Khokhlova. A la vez, comenzó otra relación con Dora Maar, mujer que admiraba enormemente la obra de Picasso, pero que acabó destrozada por esa relación, sumida en una profunda depresión mientras Picasso incorporaba una tercera mujer de manera 'estable' a su vida: Françoise Gilot.

Pero volviendo a Maya, la hija de Picasso ha fallecido recientemente, razón por la que Sotheby's ha decidido poner a la venta el cuadro cubista Niña con barco, Maya, de Pablo Picasso, con una estimación que oscila entre 15 y 20 millones de euros. Esta obra, realizada el 4 de febrero de 1938, cuando la pequeña modelo tenía dos años y medio, significó el inicio de una serie de catorce trabajos datados entre enero de 1938 y noviembre de 1939 que protagonizó la segunda hija del pintor.

De Picasso a Versace

El artista conservó hasta su muerte, en 1973, en su colección particular, la pintura que ahora se vende en Londres, y que posteriormente fue adquirida por el modisto Gianni Versace, que llegó a contar con otras 25 obras del genio malagueño, subastadas en 1999, tras su asesinato. El retrato infantil de Maya es el primero que se licita desde ese año con ella como protagonista, y también el primero que busca comprador tras su fallecimiento el pasado mes de diciembre.

El verdadero nombre de Maya era María de la Concepción, muchos creen que como homenaje de Picasso a su hermana Conchita, fallecida y enterrada en La Coruña siendo pequeña, cuando la familia residía en la ciudad gallega, donde el padre ejercía como profesor de dibujo. Como la segunda hija del creador cubista tenía dificultades para pronunciar su nombre de pila, sus padres eligieron llamarla Maya.

“El 5 de septiembre de 1935 se acabaron los días de los cuentos de hadas, sin embargo, puedo decir que al nacer tuve dos seres mágicos velando mi cuna: mis padres, Picasso y Marie-Thérèse. Dos seres unidos para toda la eternidad. Ligados por el amor a la vida y al amor mismo", manifestó Maya.

Picasso pintó el último retrato de Maya en 1953, cuando su hija estaba a punto de cumplir 18 años. La nieta del malagueño e hija de Maya, Diana Widmaier, analizó la relación entre ambos durante la infancia de su madre, en una celebrada muestra: «Maya Ruiz-Picasso, hija de Pablo», en el Museo Picasso de París, donde se exhibió por primera vez la pintura que se licita el 1 de marzo, acompañado por otros de ese misma serie.