Inauguración
La Galería de las Colecciones Reales, la muestra que inaugura la verdadera museística moderna
Obras de arte, objetos o vehículos de la vida de las antiguas monarquías se muestran en una impresionante exhibición que celebra su estreno con cuatro días de entrada gratuita a partir de este jueves
Es más que posible, casi seguramente cierto, que cualquiera haya podido ver en alguno de los palacios de Patrimonio Nacional, en el pasado pertenecientes a las monarquías de los Austrias o de los Borbones, un enorme tapiz de veinte metros cuadrados colgado en una enorme pared de un salón real, pongamos del Real Sitio de Aranjuez. Pero si al lado se encuentra con una armadura que perteneció a Carlos V el asunto cambia.
Las Colecciones Reales estaban separadas (y seguirán estándolo, pero de otra forma) en los distintos edificios antiguamente pertenecientes a los viejos reyes, y ahora pueden estar en uno solo, en la nueva Galería de las Colecciones Reales que «cuelga» sobre el Campo del Moro, en el Mirador de la Cornisa de Palacio, entre el Palacio Real y la Catedral de la Almudena. 40.000 metros cuadrados y 6.000 de espacio expositivo en una muestra de tres plantas, dos de ellas fijas y una temporal, a donde irán llegando y de donde irán saliendo las impresionantes colecciones de los monarcas para contemplación del mundo entero.
172 millones de inversión total en un proyecto que se ideó hace 25 años y que por fin ha cobrado forma. 139 de aquellos millones se han destinado a la construcción del edificio, obra de los arquitectos Emilio Tuñón Álvarez y Luis Moreno Mansilla. Arquitectura sobria, sencilla, lineal y moderna en una especie de trastienda perfectamente ubicada en el punto desde donde creció Madrid, según explicó Tuñón en la rueda de prensa inaugural.
Un lugar con «visión periférica, de colonización, que mira a la naturaleza» y que se adentra en la riqueza del Patrimonio español mostrado a todos los españoles y al mundo entero. Las colecciones que van desde las ropas de los propios reyes, sus vajillas, su cubertería, sus libros (como una primera edición de El Quijote allí abierta para todos los públicos), sus cuadros de Velázquez o de El Greco, sus retratos íntimos, sus fuentes de piedra (de 10.000 kilos de peso) o hasta los cimientos de las viejas murallas del castillo de los años 800 sobre los que se levantó Madrid, expuestos como en una sensacional pantalla de cine que solo es un inmenso vidrio a través del cual se contempla el increíble tesoro.
25 años del trabajo común de los mejores expertos, según expresó Ana de la Cueva, presidenta de Patrimonio Nacional, y explicó Leticia Ruiz, directora de las Colecciones Reales, que obtiene ahora sus ansiados frutos en uno de los más atrayentes museos del mundo, generador de una expectación a la altura de su fondo único, cuya tercera planta acoge ahora En Movimiento, la muestra de los vehículos y carruajes de Patrimonio Nacional. Siglos de bienes reunidos por la monarquía española y comisariados por Isabel Rodríguez.
Un recorrido cronológico y temático por la historia del carruaje en España, vehículos de tiro realizados y ornamentados por los mejores artesanos, que representan la gran relevancia de la monarquía. Joyas como la litera del emperador Carlos V, o la silla de manos de la reina Bárbara de Braganza, casi explicados en los cuadros de Pieter Brueghel el Joven, de Battaglioli o de Martínez del Mazo o por las esculturas de La Roldana.
El carruaje infantil de Isabel II o los trineos maravillosamente decorados. El Landó de Bronces de 1829 o el Coche de la Corona Real se mueven en el tiempo, asombrosamente conservados incluso en sus delicadas telas de dos siglos de antigüedad y compartiendo el espacio temporal con el exclusivo Mercedes Benz todoterreno que Hitler le regaló a Franco en 1939 (el otro se lo regaló a Mussolini), o el otro Mercedes Benz 770 Grosser, el coche blindado que también quiso regalar el Führer al dictador español, pero que finalmente este compró en 1945. El tiempo de los reyes (y de quien quiso serlo) reunido a través de los siglos en el nuevo gran museo español que abre sus puertas este jueves para mostrar la eternidad desde el pasado de su contenido hasta el futuro de su continente.