Un raro Miró de su serie de las mesonitas por 3,3 millones de euros, un móvil de Calder por 2,9 millones, un óleo de Picasso por 2,5 millones y una estatua de Chillida por 1,2 millones
La galería Leandro Navarro vende la pieza más cara de esta feria: un Joan Miró valorado en 3.350.000 mil euros. La obra lleva por título Verano de 1936 y es uno de los 27 cuadros que pintó el artista pertenecientes a la serie de 27 masonitas y de las cuales solo dos permanecen en España, una en la fundación Mirò y otra en el Thyssen. Esta serie tiene un significado especial ya que el pintor la hizo durante la Guerra Civil y porque experimentó por primera vez con materiales como el alquitrán, el betún o la arena.
Compotier, boutille et paquet de cigarettes, óleo sobre lienzo, Pablo Picasso, 1922 - Evelio Jiménez
En este caso es la Galería Guillermo de Osma la que se apunta la segunda obra más cara de la feria con un óleo de Picasso por 2,5 millones de euros. La galería ya había dejado ver esta obra previamente en la exposición Las miradas de Picasso el pasado diciembre en Madrid. Una exposición que aludía a lo que representa este cuadro precisamente: los modos de ver que tenía el artista y la multidisciplinariedad que lo caracterizó.
Hierros de temblor III, 1957 - Eduardo Chillida
En cuanto a esculturas la obra más cara ha sido presentada por la galería Cayón. Hierro en el temblor III es la escultura con la que Chillida ganó el premio Bienal de Venecia de 1958 y cuenta con un precio de salida de 1,2 millones de euros. El escultor guipuzcoano comenzó a experimentar a través de estas esculturas con una manera diferente de tratar el hierro mediante la torsión y el corte, una investigación plástica que fue determinante en el posterior desarrollo de su carrera artística.
Sin título, 1965 de Alexander Calder - Galería Elvira González
La obra móvil de Alexander Calder presentada por la Galería Elvira González tiene un valor de 2,9 millones. Estas láminas de metal pintando y alambre forman parten de la revolución del concepto de escultura que creó Calder. La ligereza, el movimiento, la sensibilidad al utilizar materiales modestos, la escultura flotando sin ningún tipo de base… son conceptos pioneros que el autor desarrolló exhaustivamente a lo largo de su trayectoria artística.