Fundado en 1910

Cap del Dimoni Cucarell

Cultura mezcla otra vez ideología y arte para «repensar» el Museo Arqueológico

Solo seis piezas componen Caps [y] Bous. El tercer cuerno del mallorquín Bernardí Roig, un «diálogo con piezas y espacios emblemáticos» sobre la memoria o la identidad

Caps [y] Bous. El tercer cuerno es un proyecto del artista mallorquín Bernardí Roig. Afirman desde el Ministerio de Cultura que Roig lo ha realizado «inspirándose en la poética de los espacios del museo (Arqueológico) y sus colecciones», y que la propuesta es «una mirada poliédrica sobre la colección en un juego pasado-presente que reflexiona sobre conceptos como la memoria, el tiempo y la identidad».

Artista multidisciplinar

Como es habitual el arte no aparece. Solo el «diálogo» de una torre de luz (que contiene en su interior una cabeza de toro con un tercer cuerno dorado) con otras esculturas ibéricas. Esto se ubica en el Patio Ibérico. En el Patio Romano se erige una cabeza de bronce con una nariz dorada y en el Jardín de las Arqueólogas una verja dorada de diez metros de largo con una puerta para «escaparse hacia adentro».

Homo

Por supuesto Roig es un artista multidisciplinar del XXI. La «multidisciplina» que a la escultura o la pintura clásicas añade el vídeo o los textos. Esto queda dentro de lo que el Museo Arqueológico Nacional llama «línea de innovación constante» donde las colecciones «son fuente de inspiración para propuestas artísticas contemporáneas que ofrecen nuevas miradas, pensamiento crítico, perplejidades y extrañezas».

El tercer cuerno de Bernardí Roig (Poliestireno expandido, LED, Aluminio) 2024MAN

Por ejemplo, la nariz dorada de la cabeza de bronce es un contraste con la ausencia de esta en las esculturas clásicas entre las que la han colocado. Hay también una pintura sobre tela hecha con tiza que representa las cabezas que faltan en el museo, un retrato a carboncillo titulado Homo (con aires del Mola Ram de Indiana Jones y el Templo Maldito) al que un triángulo desfigura, y una cabecita de bronce bañada en oro titulada Cap de Dimoni Cucarell (la cabeza de un demonio).

Anibal J.

Una vaga propuesta inspirada mayormente en los Toros de Costitx, tres piezas de bronce de entre los siglos V-III a. C. que un campesino encontró en 1895 y que se exponen en el Museo junto a esta propuesta, El tercer cuerno, que según el artista «es la metáfora que amplía la verdad del objeto hallado y revela lo que le crece al objeto auratizado y musealizado cuando acumula una infinidad de miradas que modifican su significado». Donde está el arte aquí es una buena pregunta, a buen seguro con respuesta posible, no tanto donde están aquí la memoria, el tiempo o la identidad por mucho que se diga, cómo no, que todo va de «repensar» el Museo Arqueológico.