'La razón en marcha': una vida digna de novela
Las memorias de Fred Copeman cuenta que ni su militancia comunista ni su credo católico jugaron en beneficio de su hoja de méritos de «buen inglés», por lo que siempre estuvo en las listas negras del MI5
Aunque esta obra se ha publicado este mes, llega a las librerías españolas con más de setenta años de retraso, ya que las memorias de Fred Copeman fueron publicadas originalmente en Gran Bretaña en 1948. La historia de Copeman es una de esas dignas de contar, dignas de novelar.
Nacido en el seno de una familia humilde de Suffolk, fue educado en una escuela destinada a huérfanos e hijos de granjeros y obreros cuyo objetivo era preparar a jóvenes para la vida en el mar. A los 14 años ya servía en un buque de guerra de la Royal Navy, y pronto sus ideas políticas confluyeron hacia los movimientos obreros y el comunismo.
renacimiento / 400 págs.
La razón en marcha
Esto llevó a Copeman, entre otras cosas, a engrosar el Batallón Inglés de las Brigadas Internacionales en la Guerra Civil española –donde cayó herido en la batalla del Jarama–, viajar al Kremlin o conocer a Dolores Ibárruri.
Sin embargo, su andanza política, como explica en este libro, lo llenó de sinsabores, para acabar convirtiéndose al catolicismo y ser recibido en el seno de la Iglesia en 1946. Ni su militancia comunista ni su credo católico jugaron en beneficio de su hoja de méritos de «buen inglés», por lo que siempre estuvo en las listas negras del MI5, el servicio de inteligencia interno británico, como más que probable sospechoso en el contexto paranoide de la Guerra Fría. Poco más se puede decir de la apasionante vida de Copeman, que no cuente él mismo en esta obra.