Esta novela es considerada como una de las mayores y más conocidas historias de amor dentro del mundo de la literatura y es, probablemente, la mejor representante del romanticismo inglés. En ella se cuenta la historia (situada en los páramos de Yorkshire) de Catherine y Heathcliff, protagonistas que se ven envueltos en una visión asombrosa y metafísica tanto del destino como la obsesión, la pasión y la venganza, finalmente.