Stephen King relaciona su gusto por 'El Señor de las Moscas' con la conquista de Harry Potter en las librerías
El autor americano reconoce en una entrevista cuáles han sido los libros de su vida
Stephen King se sinceró en una entrevista con motivo del 50 aniversario de su primer libro, Carrie, y ofreció información interesante sobre sus preferencias literarias y su ejercicio de la escritura.
A sus 77 años, King todavía recuerda las novelas favoritas de su infancia, y los cambios de opinión que experimentó antes de ser escritor.
El autor americano, después de 50 años de carrera de escritor, reconoce que aún sigue descubriendo nuevas lecturas y aplicando al ejercicio diario de escritura enseñanzas y herramientas que adquirió cuando era un niño.
Durante una entrevista para The Guardian ha revelado que, para él, El Señor de la Moscas, del Nobel de Literatura William Golding, supuso lo que para los niños de después implicó el lanzamiento de las novelas de Harry Potter: una inspiración.
En la entrevista explica que nunca se vio de superviviente en una isla desierta como en la obra mencionada, ni tampoco aprendiendo magia dentro de una universidad, como en las novelas de Harry Potter, pero reconoce que El Señor de las Moscas fue la novela que le llevo a querer ser escritor. «Sentí que si podía hacer algo así, sería feliz. ¿Y adivina qué? Tenía razón», declaró en la entrevista.
Aunque su vínculo con la escritura aparece en su adolescencia gracias al clásico de Golding, su primer recuerdo de lectura fue, en realidad, otro.
«Tenía cinco años y estaba en nuestro apartamento del tercer piso en Stratford, Connecticut. El libro era Los 500 sombreros de Bartholomew Cubbins, del Dr. Seuss».
King también señaló que durante su infancia descubrió a Agatha Christie. Reconoce que no se puede quedar con ningún libro de la autora británica, pero bajo su criterio es «la novela policíaca perfecta». Se convirtió en su favorita.
Juventud y cambios de ideas
Con la lectura de Studs Lonigan, de James T Farrell, empezó a entender cómo una novela escrita para un público específico podía contener elementos que captaran la atención de otro tipo público.
«Hizo lo que hacen las novelas juveniles, pero con preocupaciones adultas. Entendí Studs desde el principio». Una novela que le enseñó las preocupaciones, a veces similares, de dos épocas distintas.
Admite haber vuelto a su biblioteca para releer algún libro por segunda vez. Uno de ellos fue Un jardín de arena de Earl Thompson. «Quería saber si era tan radical como lo recordaba. Lo era». Una obra que narra la vida de una familia en momento complicado para los Estados Unidos.
También reconoce que, en alguna ocasión, no ha podido llegar al final de un libro, y desvela uno en concreto que tuvo que devolver sin terminar en su biblioteca. «Probablemente, The Robe, de Lloyd C Douglas, fue el libro que nunca pude terminar de leer».
Con casi 70 novelas publicadas, de entre sus lecturas destaca una, una novela que, además, tardó en descubrir.
Se trata de El corazón es un cazador solitario, de Carson McCullers, y la peculiar reflexión que hace sobre el personaje principal, Singer.
Este empieza a comportarse diferente después de que su amigo, Antonapoulos, el otro integrante principal, entre en un centro psiquiátrico y quede distanciado de él.
Es a partir de aquí cuando Singer empieza a relacionarse con unos conocidos suyos y los conflictos empiezan a aparecer en su vida. «Al protagonista, en realidad, no le importa ninguno de ellos, él tiene sus propios asuntos que resolver, pero ellos creen que él lo sabe todo y que es omnisciente».
Por último, ha confesado con qué libro está ahora. Se trata de After Midnight, de la autora Daphne du Maurier. Se publicará en 2025 y Stephen King la recomienda a todo amante de la literatura de misterio.