Pink Floyd y su psicodelia se adelantaron al telescopio James Webb en los 70
Varias portadas de los discos de la banda de rock británica recuerdan a las nuevas imágenes del universo retratadas por el mayor observatorio espacial del mundo
Los responsables del telescopio espacial 'James Webb' han publicado hoy todas las primeras imágenes tomadas por este observatorio astronómico, el mayor que se ha lanzado al espacio. Las nuevas instantáneas y datos científicos retratan exoplanetas gigantes, grupos compactos de galaxias y la nebulosa más brillante conocida.
Las imágenes, compartidas por la NASA, han dado la vuelta al mundo, por su novedad, por la cantidad de información nueva que aportan y por su belleza. Una belleza que nos ha hecho pensar que ese negro con luces borrosas que contiene miles de millones de estrellas, galaxias y cuerpos celestes recuerda a las referencias estilísticas de un gran grupo de rock británico.
En 1972, Pink Floyd lanzaba al mercado Obscured by clouds, su séptimo álbum de estudio. Este disco fue concebido como banda sonora para la película francesa El valle, dirigida por Barbet Schroeder, y como tal, no sigue la línea musical que la banda llevaba hasta el momento, pero ayudó mucho al éxito en Estados Unidos al haber enfocado buena parte de la gira previa a Dark Side Of The Moon.
Diseñada por Storm Thorgerson y Aubrey Powell, de la firma de diseñadores Hipgnosis, la imagen de portada que eligieron para el álbum, que podría emular un cielo estrellado, es en realidad una fotografía de un hombre sentado en un árbol. La diapositiva se atascó en un proyector de 35 mm mientras la banda decidía qué foto utilizar para la portada, y a todos les gustó la forma en que se distorsionaba por completo.
Otro ejemplo similar se puede encontrar en el álbum de 1968 A Saucerful of Secrets. Para conseguir «un aspecto inquietante» en su segundo álbum de estudio, los diseñadores londinenses de Hipgnosis superpusieron 13 imágenes distintas. Era la segunda vez que EMI permitía a un equipo creativo externo crear las ilustraciones de un álbum, después del Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band de los Beatles.
Este es un álbum de transición, marcado por el desequilibrio mental y posterior partida de Syd Barrett y la llegada del nuevo integrante David Gilmour. Es el único disco de Pink Floyd en el que participan los cinco integrantes, y se considera como el primer álbum de rock progresivo. Está compuesto fundamentalmente por temas sobrantes del primer álbum, complementados con otras rarezas, que se observan también en su portada.
Aunque un poco cogida con alfileres, en 1995 Pink Floyd escogió una visión aérea de la Tierra vista desde el espacio para la portada del disco Pulse. En realidad, el «ojo» fue creado a través de la combinación de 36 imágenes diferentes.
Se trata de un álbum recopilatorio donde figuran todos los temas de The Dark Side of the Moon y también otros como Shine on You Crazy Diamond, Comfortably Numb o Wish You Were Here –lanzado como sencillo–, aunque recibió críticas por la escasa innovación de sus pistas con respecto a las originales. Sin embargo, lo que más llamó la atención del diseño del disco fue que incluía una luz en el lomo, algo novedoso, pero caro: requería dos pilas para funcionar.
Cabe recordar que en aquellos años los diseños de los álbumes eran clave, y por ello Pink Floyd confió 16 de sus 19 portadas a la empresa Hipgnosis. «En aquellos días, las portadas de los discos eran muy importantes para la persona que los compraba porque no había MTV, ni había vídeos musicales ni existía la saturación de YouTube o cualquier otra fuente disponible para conocer a tu estrella de rock favorita», explica el cofundador de Hipgnosis, Aubrey «Po» Powell. «Comprabas un álbum y escudriñabas la portada mientras lo reproducías, buscando pistas sobre lo que inspiraba a esos artistas». Con las imágenes del telescopio 'James Webb', tanto los componentes de Pink Floyd como los diseñadores de Hipgnosis lo habrían tenido mucho más fácil.