Serrat recibe un premio a los Derechos Humanos copado por activistas y revolucionarios de izquierdas

El cantautor español Joan Manuel Serrat dijo el lunes en Uruguay, donde se encuentra de visita por su última gira, «El vicio de cantar 1965-2022», que «la palabra solidaridad está últimamente devaluada» y animó «a luchar por la justicia y la libertad que debemos pelear cada día».

Fueron sus palabras tras recibir el Premio Internacional a la Lucha por los Derechos Humanos y la Solidaridad, que entrega la Fundación Mario Benedetti. También aseguró que «luchar por los derechos humanos es luchar por uno mismo» y que «si no mantenemos una actitud de defensa, perderemos la justicia».

El cantante español dijo sentirse «orgulloso» por recibir un premio que lleva el nombre de un amigo con el que compartió «los azares de la vida» en un pasado y un proyecto discográfico «muy exitoso», y lamentó las pérdidas recientes tanto del propio Benedetti, como de Eduardo Galeano, entre otros.

Frente Amplio

Junto a Serrat también fueron reconocidos con el premio la tribu Munduruku de Brasil, opositores a los madereros que talan los árboles de su territorio. El activista de ascendencia lakota Leonard Peltier, fue el primer galardonado en 2013.

Otros premiados han sido la jurista Mariana Mota, que investigó las violaciones de Derechos Humanos de la dictadura militar uruguaya, la profesora Belela Herrera, exvicecanciller chilena del partido de izquierdas Frente Amplio (que se define como antiimperialista, antirracista y antipatriarcal), el maestro Miguel Soler, el teólogo brasileño Leonardo Boff, cercano a la teología de la liberación, como el poeta y también sacerdote nicaragüense Ernesto Cardenal, el periodista Guillermo Chifflet (también fundador del partido izquierdista chileno Frente Amplio), el poeta y activista chileno Raúl Zurita y el Movimiento de Víctimas de Crímenes del Estado de Colombia.