El grupo de la proetarra Itziar Ituño publica justo ahora su primer disco después de siete años de existencia
La actriz vasca es conocida por su papel en la serie La casa de papel y más aún por su manifiesto apoyo a la ETA
Es paradójico que Itziar Ituño, la actriz que se manifiesta públicamente a favor de la ETA, hiciera el papel de una policía en la serie que le dio mucha menos fama que su exhibición ideológica. Ya no solo cotiza ser de izquierdas, sino también, penosamente, de la izquierda abertzale.
Letras feministas y ecologistas
Lo que no es paradójico, aunque lo parezca, es que siete años después de haber formado un grupo musical de nombre Ingot, sea justo ahora, cuando el Gobierno pacta con los herederos de la ETA una reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana en una distopía hecha realidad, la sartén donde se cocina la «cultura» española, esa banda haya publicado su primer disco.
Ser afín a unos asesinos proporciona réditos, en este caso «artísticos». Resulta que al grupo rockero de Ituño no lo conocía nadie. Ni siquiera en Vizcaya. Pero ahora acaba de grabar su primer disco. Y por dar más detalles en lengua vizcaína, que no es el batua habitual del euskera, y con letras feministas y ecologistas. Qué casualidad tan asombrosa. Júzguese de modo propio el asombroso talento de los protagonistas:
Cualquiera diría que han nacido para triunfar (aunque hayan nacido hace siete años), con ese escenario y ese atrezo y esa música y esa voz. Pero hace siete años ni lo etarra, ni siquiera el feminismo o el ecologismo tenían la importancia del presente y, sobre todo, de Itziar Ituño debían de saber algo en Basauri y a lo mejor en algún sitio más. Las letras de las canciones las compone la actriz, mayormente sobre ecologismo y feminismo, pero también sobre indigenismo e independentismo.
Que no falte ningún ingrediente en la pócima del grupo que «hace música desde Euskal Herria, desde cero y para acabar con los bulos». Resulta casi impresionante el estudio topográfico de la situación social e ideológica realizado por estos músicos antropólogos, además de proetarras.
A falta de talento
Han hecho un análisis pormenorizado de los usos y costumbres y los han metido en un disco que nunca antes (y el medio siglo ya no lo cumple ninguno de sus miembros) la suerte y el genio consiguieron cristalizar, por mucho que Scott Fitzgerald dijera aquello de: «Nunca es demasiado tarde o demasiado pronto para ser quien quieres ser. No hay límite en el tiempo, empieza cuando quieras...», o en este caso cuando, a falta de cualquier resquicio de talento, siete años después, la ignominiosa situación política y social lo haga posible.