El director británico Declann Donnellan, experto en Shakespeare, se atreve en español con 'La Vida es Sueño' de Calderón

Tragedia, comedia y la lucha del ser humano contra el destino: los temas principales de una de las obras más representativas del teatro español, La vida es sueño, de Calderón de la Barca. El conocido director y especialista en Shakespeare, Declan Donnellan estrena su primera obra en español en el Teatro Lope de Vega de Sevilla junto a la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC).

Un montaje en coproducción con LaZona y Cheek by Jowl, la compañía que el mismo Donnellan dirige desde su fundación en 1981. Esta es la primera función dirigida por el dramaturgo británico con actores españoles, y su segunda representación teatral en Sevilla, 31 años después de Fuenteovejuna, en una versión en inglés.

El director rememoró su paso por Sevilla en el pasado: «Una de las noches más memorables en un teatro en los 41 años que llevo en el mundo del teatro», comentó a los medios.

El recorrido de la función, después de este fin de semana en Sevilla, pasará por las ciudades de Gerona, Valladolid, Valencia, Avilés, Madrid y Alicante. También habrá una pequeña gira internacional que trasladará la función a la Barbican de Londres y a Francia, a la Scène Nationale d’ALBI•Tarn, que también colabora en esta gran producción.

Tras la fundación de Cheek by Jowl, Donnellan ha visitado con su compañía más de cuatrocientas ciudades en las que ha dirigido cuarenta producciones que no se han limitado al repertorio de Shakespeare. Además, ha trabajado en los festivales de Avignon y Salzburgo y en los teatros de Bolshoi, el Piccolo Teatro de Milan y el Noel Coward Theatre de Londres. También ha sido director asociado del Royal National Theatre de Londres, y en cine codirigió con Nick Ormerod el largometraje Bel ami, estrenado en 2012.

Considerada la obra teatral más importante del Siglo de Oro español, La vida es sueño del poeta Calderón de la Barca fue estrenada en 1635. Consta de tres actos y mezcla tragedia con comedia para abordar el asunto de la libertad del ser humano para configurar su vida sin dejarse arrastrar por el destino.

Donnellan incide en su versión en la incertidumbre existencial con la que Calderón de la Barca dotó a este drama barroco, mientras que Ormerod, responsable de la escenografía y del vestuario del montaje, ha dotado la escena de su peculiar imaginación y capacidad para el juego, con un elemento que domina la escenografía: un muro verde con varias puertas.

Donnellan y Ormerod han tenido muy en cuenta la intervención en el proceso creativo del cuadro actoral, lo que según los responsables de la producción ha hecho posible una obra «urgente, potente y profundamente contemporánea», tanto en el mundo que retrata como en las relaciones que establece. Ese sistema de trabajo ha permitido a la compañía estar «completamente viva» y cultivar «una intimidad entre el texto y los intérpretes que encarnan cada uno de los personajes».

Este proyecto comenzó en 2019 cuando nombraron a Lluis Homar director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico.