Neymar y Mbappé: no hay balón para tanta estrella

Cuando el PSG empezó a coleccionar estrellas se habló de la posibilidad de cómo gestionar tanto ego. El primero que alzó la voz este año ha sido Gianluigi Donnarumma al no entender su suplencia en favor de Keylor Navas. Un enfrentamiento que, de momento, no ha llegado a más. 

Sin embargo, el conflicto que ha hecho saltar las alarmas en París y preocupa en Camp des Loges ha sido el protagonizado por dos miembros de su tridente de ensueño: Neymar y Mbappé. Un conflicto que comenzó con la llegada del brasileño a París, pero que se mitigó pronto por una conversación entre ambos donde el delantero francés aseguró a 'Ney' que no pretendía ocupar su lugar.

El conflicto parecía solucionado y el año 2021 comenzaba con una declaración de lo más paternalista del brasileño, considerando al francés como un hermano y alejando todo atisbo de polémica: «Yo soy el mayor. Nos encanta jugar juntos y quiero sacar lo mejor de él».

Tres son multitud

Sin embargo, la llegada de Leo Messi a París y la frustrada salida de la estrella francesa este verano han agrietado la relación entre ambos. Neymar ha cerrado filas con Leo, dejando a Kylian en un lugar incómodo. Tal es así, que las cámaras cazaron una rajada de Mbappé sobre Neymar durante la última jornada de liga. El galo se quejó de que el carioca no le pasaba el balón y lo tildó incluso de «vagabundo».

Todo esto en vísperas de un PSG- City, donde ambos clubes luchan por liderar el grupo A y con el equipo parisino ganando por la mínima en la competición doméstica. Quedan tres meses para que Mbappé quede libre del PSG y pueda firmar por un nuevo club, pero muchos más para que pueda llegar a su nuevo destino. Mientras, queda en el aire la convivencia de uno de los tridentes más peligrosos de Europa. ¿Qué pasará? Es difícil saberlo, pero el refranero español es muy sabio y puede darnos una pista: tres son multitud.