Koeman está sentenciado

Ronald Koeman se salva del cese, por el momento, pero su final en el Barça parece más cercano que nunca. En las oficinas del club se trabaja intensamente en buscar un sustituto para el holandés que ha agotado todo el crédito que la directiva le había confiado, que tampoco era mucho. Ante el Levante salvó el primer match ball pero la sonrojante derrota ante el Benfica lo ha precipitado todo.

Decía Murphy que si algo puede salir mal, saldrá mal y eso es lo que le está ocurriendo al Fútbol Club Barcelona. El conjunto culé volvió a vivir una pesadilla en Champions y, de nuevo, en Lisboa. Allí el Bayern de Múnich le endosó la pasada campaña una de las derrotas más dolorosas que se recuerdan (2-8) y ayer el Benfica le goleó tres a cero, un resultado que pone contra las cuerdas a Ronald Koeman y tiñe de negro el futuro del conjunto barcelonista en la máxima competición continental. El conjunto catalán es el actual farolillo de su grupo, con cero puntos, cero goles a favor y seis en contra. Ambas derrotas con idéntico resultado, tres goles a cero. Ahogado por las deudas y por las dudas que genera su juego, la entidad culé vive uno de los peores momentos de su historia.

El Metropolitano será su última parada

El partido ante el Atlético de Madrid es muy probable que  sea el último que dirija el holandés como técnico del conjunto culé, aunque no se sentará en el banquillo al cumplir su segundo partido de sanción.  

En Can Barça trabajan  contra reloj para confirmar el relevo de Koeman. Los mejor colocados, a día de hoy, para sustituir al holandés son Andrea Pirlo, Roberto Martínez y el omnipresente Xavi Hernández. Pero antes, hay que solucionar un tema espinoso: el finiquito del todavía entrenador valorado en unos doce millones de euros. Un coste al que habría que añadir el sueldo del nuevo técnico. Lo que sí está claro es que el nuevo entrenador tendrá la total confianza al  de su presidente, a diferencia del todavía técnico culé. 

De todos era conocido que el autor del gol que le dio la primera Champions al Barça no era un técnico del agrado del máximo dirigente de la entidad e incluso le llegó a pedir quince días para encontrarle un sustituto. La maltrecha economía barcelonista obligó a ambos a entenderse. Con los resultados en contra vuelven a salir fantasmas del pasado y ninguna de las partes oculta sus diferencias. Si hace unos días era Laporta el que asegura que «todo tiene un límite», tras la derrota en Lisboa le tocó el turno al técnico holandés que afirmó que «me siento respaldado por mis jugadores, por el club no lo sé».

Futuro negro en Champions

Con la derrota ante el Benfica, el club está en un callejón de difícil salida. La próxima jornada ante el Dinamo de Kiev, en casa, podría dar la estocada definitiva al Barça en Europa y a sus maltrechas arcas. 

Caos económico

 La salida de Leo Messi evidenció la mala situación económica del club que se vio abocado a tener que recurrir a fichajes a coste cero, que incluso hasta el último momento no pudieron inscribir. Otro ejemplo que pone de manifiesto la grave crisis económica que atesora el Barça es la cantidad que dispone para pagar a su plantilla. LaLiga dio a conocer  los límites salariales de los clubes de Primera División. El club que preside Joan Laporta ocupa la séptima posición con 93 millones de euros, más de 280 millones de euros menos que la temporada pasada y siete veces menos que su rival, el Real Madrid.