Barça-Madrid: el Clásico donde poder dar el primer golpe en la mesa de la temporada
Los de Ancelotti llegan con la moral por las nubes y con Benzema y Vinicius en estado de gracia. Los culés, por su parte, confían en la magia de Ansu Fati para poder llevarse un encuentro con el que pasarían a los blancos en la clasificación
El primer Clásico de la temporada ha llegado. Será el primero que se juegue sin los reyes de este tipo de partidos. Messi y Sergio Ramos mirarán por televisión un partido que han jugado los últimos dieciséis años. A partir de este 24 de octubre pasan a ser leyendas vivas de los Clásicos. Benzema y Busquets son, a partir de ahora, sus herederos. Ambos serán además los capitanes de sus equipos.
Los blancos llegan con dos puntos de ventaja al Camp Nou y con la moral por las nubes tras su goleada en Champions y su reconciliación con el buen juego
'Benzegol'
Por si esto fuera poco, los de Carlo Ancelotti tienen en Benzema al hombre que, últimamente, todo lo convierte en gol. Pichichi con once goles en sendos encuentros, el francés anota un gol cada 58 minutos. Karim, que ya está al cien por cien tras haber trabajado varios días alejado del grupo por un golpe en el tobillo, aparte de heredar el honor de ser el madridista que más clásicos ha disputado hay que sumarle los diez goles que ha hecho a los culés. Con el fin de las votaciones para el Balón de Oro fechada para ese día, Karim querrá seguir sumando adeptos a su candidatura.
Ansu Fati vs. Vinicius
Un Clásico sin Messi, Ramos o Cristiano Ronaldo, pero con Ansu Fati y Vinicius. El duelo de las jóvenes estrellas será uno de los que más flashes acumulen. No se recuerda un partido de estas características en el que dos jugadores tan jóvenes sean los que mas pasión levanten entre sus aficiones. El culé, recién renovado, espera poder seguir al buen nivel que demostró en su reaparición tras su grave lesión.
El brasileño, por su parte, llega al Camp Nou con la vitola de estrella consagrada: 7 goles en 11 partidos. Además, el brasileño aportará su cargamento de bicicletas y regates que harán de la banda izquierda uno de los mayores generadores de peligro de los blancos.
Alaba, un sinónimo de goleada
El austriaco vivirá su primer Barça–Madrid de blanco, pero ya sabe lo que es pisar territorio blaugrana y tiene muy buenos recuerdos.
Tres victorias en tres partidos mientras defendía la camiseta del Bayern de Múnich, incluyendo el sonado 2–8 en Lisboa, la derrota más abultada en un partido de Liga de Campeones en la historia del Barcelona. Antes, en las semifinales de la Liga de Campeones de la temporada 2012–2013, el austríaco fue partícipe, con dos asistencias, de las dos goleadas (4–0 y 0–3) que sufrió el conjunto azulgrana; con un 7–0 de global que siete temporadas después casi se hizo corto.
Una oportunidad única
El Real Madrid se encuentra ante una oportunidad única de endosar a su máximo rival una derrota que remueva los cimientos en Can Barça. Los azulgrana arrastran dudas y un inicio de campaña nada prometedor. Una victoria blanca en feudo culé dejaría en nada la victoria que consiguieron los barcelonistas ante el Dinamo de Kiev que salvó sus aspiraciones en Champions y consiguió, por el momento, relajar el ambiente en un club que, últimamente, es más noticia por lo que hace fuera que dentro del terreno de juego.
Eso sí, una victoria culé haría que los de Koeman adelantaran a los blancos en la clasificación. Los madridistas liberan la enfermería y recuperan a Hazard, que podría vivir su primer Clásico como madridista, y Carvajal que se unen a los ya recuperados Mendy y Marcelo
Ancelotti vs. Koeman
El italiano no ha ganado nunca en el Camp Nou y, como reconoció en la previa, «Es el momento».
Ambos técnicos se han enfrentando tanto en el campo como en los banquillos. El único duelo entre ambos como jugadores se produjo el 21 de febrero de 1990, cuando los Países Bajos e Italia se enfrentaron en un amistoso en Rotterdam que terminó sin goles. Como técnicos se han visto las caras en cuatro ocasiones, ganado siempre el italiano.