El jugador Martin di Nenno se vio obligado a abandonar el Premier Padel de Egipto
Abandonos y golpes de calor: las extremas condiciones del Premier Padel de Egipto
El torneo del circuito creado por Nasser Al-Khelaïfi, en paralelo al World Padel Tour, está siendo un auténtico caos por las altas temperaturas propias del lugar elegido
El Premier Padel de Egipto, torneo creado por la Federación Internacional de Pádel y Qatar Sports Investments, ha comenzado con polémica y críticas hacia su organización.
Estas críticas llegan con el abandono del torneo de una de sus mayores estrellas, el argentino Martín Di Nenno, que debido a las drásticas condiciones climatológicas se vio obligado a ser atendido por los sanitarios y retirarse del partido.
La pareja formada por el argentino y Coki Nieto, su compañero desde inicios de octubre, comenzó el encuentro dominando, haciendo un juego y set casi perfecto, 6-1.
El segundo set fue completamente diferente, sus rivales se metieron en el partido después de un juego casi en blanco y mostraban su mejor versión sobre la pista. Pero el argentino notó que algo no iba bien, se le notaba fatigado y su actividad por la pista no era la misma a la del primer set.
De esta forma, se vieron obligados a retirarse del partido al no aguantar las extremas temperaturas.
Grandes problemas físicos en Egipto
El torneo de este circuito que se disputa en la ciudad de El Cairo, está provocando que los jugadores lleven su condición física al extremo, ya que las altas temperaturas, de unos 30 grados, pero sobre todo la gran humedad, provocan duros golpes de calor a lo que los participantes no están habituados.
Los aficionados critican en gran medida a la organización del circuito por la nefasta elección de ubicación del torneo, y ver como los jugadores sufren las consecuencias de las condiciones extremas a las que se deben enfrentar.
Las imágenes que está dejando el Premier Padel de Egipto son preocupantes, los sanitarios se desplazaron entre las tres pistas con las que cuenta el torneo, y los jugadores sufriendo por mantenerse en pie dentro de la cancha.
El malestar de la mayoría de participantes dura apenas solo unos minutos y después pueden recomponerse sin problemas. Pero la situación amenaza con que se pueda sufrir un incidente de gravedad y lamentar las consecuencias.