Una ciclista se retira tras perder ante una corredora trans: «Es una injusticia»

La participación de deportistas trans en categorías femeninas sigue generando mucha polémica. En los últimos días ha dado mucho que hablar lo ocurrido en Estados Unidos en el Campeonato Nacional de Ciclocross, donde Hannah Arensman, una competidora de 25 años ha anunciado su retirada después de caer derrotada ante un corredor que nació siendo hombre. En concreto, Arensman llego a la meta clasificada en cuarto lugar entre dos competidores transexuales.

Ante esto, Hannah Arensman ha sentido una gran impotencia que la ha llevado a anunciar su retirada definitiva. La ciclista considera que esto no es justo y que sus duros entrenamientos no se ven recompensados al competir contra rivales con mayor capacidad física. La americana ha perdido lo que sería un bronce histórico ante alguien que para ella no debería estar compitiendo en esta categoría y eso ha provocado que tire la toalla, pues además de ese bronce también se quedó sin participar en el Campeonato del Mundo de Ciclocross que se disputó en el mes de febrero, pues para ello necesitaba una de las tres primeras posiciones.

Esta desilusión la ha llevado a poner fin a su carrera para protestar ante una situación que considera injusta para las mujeres y que cada vez recibe más críticas por parte de las deportistas. De hecho, su retirada ha salido a la luz pocos días después de que World Athletics, la Federación Internacional de Atletismo, estableciese que las atletas trans no pueden competir en pruebas femeninas internacionales.

La popularidad de Arensman ha provocado que se tenga que cerrar sus redes sociales para alejarse de todo el ruido mediático que comenzó con el comunicado que emitió para explicar los motivos de su retirada: «De cara al futuro, lo siento por las chicas jóvenes que están aprendiendo a competir y que están creciendo en una época en la que no van a tener una oportunidad justa de conseguir el nuevo récord y ser campeonas de ciclismo porque los hombres quieren competir en nuestra categoría».

«Me he sentido profundamente enfadada, decepcionada, ignorada y humillada por el hecho de que los legisladores de los deportes femeninos no consideren necesario proteger el deporte femenino para garantizar una competición justa para las mujeres. Mi hermana y mi familia sollozaron al ver a un hombre terminar frente a mí, después de haber presenciado varias interacciones físicas con él durante la carrera. No es justo», continúa explicando en el anuncio de su retirada.

«En los últimos años, he tenido que competir contra ciclistas masculinos en pruebas femeninas. A medida que se ha ido convirtiendo en una auténtica realidad, cada vez resulta más desalentador entrenar tan duro como lo hago para acabar perdiendo contra un hombre con la injusta ventaja de un cuerpo androgenizado. He decidido poner fin a mi carrera de ciclista», concluye.

La retirada de Hannah Arensman, ganadora de 35 pruebas del circuito nacional de ciclocross, ha formado parte de la documentación presentada ante el Tribunal Supremo de los Estados Unidos en apoyo de la ley de Virginia Occidental que protege el deporte femenino y que ha contado con numerosas firmas, entre ellas la de una leyenda del tenis como Martina Navratilova.