Momento surrealista en la Vuelta: dos corzos cruzan la carretera y se llevan por delante a dos ciclistas

El ciclismo es uno de esos deportes que siempre gusta ver, ya que por televisión se suelen vislumbrar parajes impresionantes y la conexión con la naturaleza suele ser fantástica. Pero también tiene sus riesgos por el hecho de disputarse al aire libre.

Y esto último es lo que sucedió en la octava etapa de la Vuelta a España, que se disputó entre las localidades de Úbeda (Jaén) y la Sierra de Cazorla, en la que los ciclistas tuvieron que recorrer una distancia de 159 km y en la que el esloveno Primoz Roglic acabó consiguiendo la victoria de etapa, lo que le sirvió para recortarle un minuto a Ben O'Connor, líder de la general.

Quedaban unos pocos kilómetros para terminar la octava etapa de la ronda española cuando dos corzos se cruzaron en la carretera y se llevaron por delante al español Txomin Juaristi (Euskaltel Euskadi) y al italiano Giulio Ciccone (Lidl-Trek), que acabaron yéndose al suelo tras la inesperada aparición de los animales.

Fue una escena tan inaudita que los propios jefes de equipo no entendían nada. Porque sí. Los corzos también saltaron por encima de los coches y provocaron el caos. «Menudos cinco minutos llevamos. Dos minutos después, otro ciervo saltó por encima del coche del médico casi chocando de nuevo con Txomin Juaristi, y un tercer ciervo saltó por encima de nuestro coche quedando atrapados entre las motos y rompiendo mucho material. No me lo podía creer, parecía una broma», relató Pello Olaberria, director de equipo del Euskaltel Euskadi.

Los dos ciclistas afectados se quedaron doloridos en el suelo durante unos minutos y la etapa se reanudó con el susto todavía en el cuerpo. Sin duda alguna, tanto Juaristi como Ciccone tardarán en recuperarse del momento de tensión que vivieron en la octava etapa de la ronda española. Nunca se había visto algo así.