La surrealista sanción a un judoca serbio por persignarse antes de un combate

Los Juegos Olímpicos de París concluyeron hace poco más de un mes y conforme ha ido pasando el tiempo han ido saliendo a la luz algunas acciones polémicas que dejan entrever que hay ciertos reglamentos que se deben de modificar y que no hacen más que manchar los grandes gestos y valores del deporte.

Una de las últimas decisiones controvertidas que se han descubierto una vez concluidos los Juegos sucedió en la prueba de judo de 90kg y el afectado por esta surrealista sanción fue el serbio Nemanja Madjov.

En Serbia profesan la religión ortodoxa-cristiana y es muy normal ver a los deportistas del país balcánico santiguarse antes de cada prueba para que Dios les desee suerte o justo al acabarla si han salido victoriosos. Y eso fue lo que hizo Madjov. Antes de competir en los octavos de final de la prueba de 90kg contra el griego Theodoros Tselidis, el judoca decidió persignarse y eso supuso una sanción de cinco meses por parte de la Federación Internacional de Judo. Los motivos de la misma fueron que el judoca había violado los códigos religiosos al hacer este gesto antes de empezar a competir.

Madjov no compartió la sanción que le llegó a principios de este mes de septiembre y decidió expresar su opinión al respecto. «En mi discurso de defensa no quise disculparme por el bautismo. Nunca lo haré. El Señor me lo dio todo, para mí es el número uno. Esto no cambiará bajo ninguna circunstancia. Lamento que en un deporte tan hermoso y difícil como el judo haya caído en tales cosas».

Debido a esta inexplicable sanción, a Madjov se le ha prohibido participar en todos los torneos, campos de entrenamiento y prácticas durante los próximos cinco meses. Esta decisión traerá cola y deja en muy mal lugar a la Federación Internacional de Judo.