Nicola Bartolini, en una imagen de archivo
Un campeón de gimnasia sufre un atraco y tumba al ladrón a puñetazos
El deportista compartió una foto de las heridas sufridas, que incluían un golpe en la frente y una lesión en la mano
Nicola Bartolini, campeón del mundo de gimnasia, vivió un momento de tensión en las calles de Milán al sufrir un intento de robo cerca de su domicilio. El atleta, conocido por su oro en suelo en el Mundial de 2021 y su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024, narró el incidente a través de sus redes sociales, donde detalló cómo un ladrón intentó arrebatarle el móvil mientras paseaba a su perro.
«Milán es una ciudad espeluznante. No hay seguridad en esta jungla de ciudades», comenzó Bartolini, describiendo el ambiente de inseguridad que se percibe en la ciudad. El asaltante lo tomó por el cuello, exigiendo su teléfono a punta de gritos. Sin embargo, lo que parecía una situación de peligro para el gimnasta, terminó siendo una lección para su atacante.
El deportista compartió una foto de las heridas sufridas, que incluían un golpe en la frente y una lesión en la mano. Pero lejos de mostrarse intimidado, Bartolini subrayó: «Me considero afortunado de haber recibido solo un puñetazo, mi pobre agresor tuvo peor suerte». Según su relato al Corriere della Sera, tras recibir el primer golpe, consiguió reaccionar, tumbar al asaltante y darle varios puñetazos en la cara.
Residente en Milán desde los 13 años, cuando se trasladó para entrenar en el Centro Técnico Federal, Bartolini mostró su preocupación por lo que pudo haber ocurrido si la víctima hubiera sido alguien más vulnerable: «No sé cómo habría terminado si le hubiera pasado a una mujer o una niña», reflexionó, llamando la atención sobre el creciente problema de seguridad en la ciudad.
Más testimonios
Este testimonio coincide con el del futbolista del Napoli, Juan Jesús, quien denunció recientemente que su coche fue destrozado por delincuentes. Además, el jugador encontró geolocalizadores instalados en su vehículo, lo que aumentó su sensación de inseguridad en Nápoles. «Pese a ser una ciudad hermosa, nunca será segura para mí», aseguró Jesús, quien lamentó el robo de sus pertenencias. «Los bienes materiales son secundarios, pero saber que un extraño ha invadido mi vida es repugnante», comentó.
Ambos casos han generado preocupación por la seguridad en algunas ciudades italianas, especialmente entre figuras públicas, que parecen estar en la mira de delincuentes. La reflexión de Bartolini y Jesús pone en evidencia la vulnerabilidad ante este tipo de situaciones, a pesar de su éxito.