El Real Madrid se queda a las puertas de la undécima

La final en el Stark Arena enfrentó a dos equipos que abrieron y cerraron la competición. Belgrado coronaría al campeón: al rey de de Europa o al vigente campeón.

Efes se llevó por delante una vez más a un equipo español. La pasada temporada fue el Barça, este año fue el Madrid. Pleiss dinamitó las opciones de un Real Madrid que llegó vivo hasta la última posesión. Fue un partido de resultado corto, pero de electrocardiograma alto. Los blancos llegaron a la final cuando pocos lo creían, pero no pudieron arrebatar a Efes el cetro continental.

Pleiss y Tavares batallaron desde el salto inicial. Madridistas y turcos mostraron el nerviosismo inicial fallando todos sus tiros. El luminoso se estrenó a los dos minutos gracias a un tiro libre de Micic. Hanga cortó la dinámica de fallos en el ataque blanco y estrenó el casillero de los blancos con una bandeja a placer. Tavares se convirtió en claro dominador de la zona blanca. Él era el encargado de subsanar los fallos desde el exterior con rebotes poderosos y puntos bajo el tablero. Los blancos, gracias a su defensa, no dejaban que los turcos encontraran su fluidez en el juego y disfrutaban de la primera ventaja (6-4, minuto 5).

Tavares, dueño de la zona

Micic, la muñeca que mece a su equipo, anotaba un triple contra el tablero de esos que dejan cara de circunstancia al defensor.

Tavares, un gigante suelto en Belgrado, seguía a lo suyo y permitía que su equipo se despegara en el marcador gracias a su protección del aro y a sus rebotes salvadores que complementaba con canastas bajo el aro. El Madrid, que no encontraba el acierto en el triple, secó a base de defensa un Efes que tenía el grifo de los puntos casi cerrado (15-8. Min 9).

Larkin acudió al rescate de su equipo cuanto comenzaba a dar síntomas de bloque con seis puntos consecutivos con los que se llegaría al final del primer cuarto (15-14) con un Eddy Tavares que sobresalía sobre el resto: 12 puntos y 7 rebotes.

El inicio del segundo cuarto sirvió para que Micic exhibiera movimientos perfectamente pulidos y para que Taylor pusiera fin a la sequía blanca desde el triple y anotó anotando

El Madrid comenzó a sufrir en defensa sin el caboverdiano con un Singleton que le ganaba la partida en la zona a Poirier. El center francés se quitó la rabia de las anteriores defensas con un mate en el que demostró no tener clemencia con el aro rival (22-22).

Causeur demostró que su exhibición de semifinales no fue casualidad y anotó un 2+1 solo reservado para los elegidos(26-22).

Micic-Larkin, termómetro de Efes

El galo, a sus 34 años, vive en Madrid una segunda juventud. Randolph disparaba a los blancos gracias a su acierto desde el triple ante un Efes que sobrevivía gracias a la producción de su famosa dupla Micic-Larkin, el termómetro de su equipo, que impedían que Efes desfalleciera. Llegaba el descanso (34-29) y el Madrid equilibraba su mal día en el tiro gracias a su buena defensa y su poderío en el rebote: 22

El descanso no relajó a los blancos que salieron a la cancha provocando una nueva pérdida más de los turcos gracias a una intensa defensa blanca. Edy Tavares seguía picando en la mina de la zona turca tallando puntos y rebotes como piedra preciosas.

Pleiss castigó el único fallo de Tavares hasta el momento y acercó a los suyos (37-31). Sin embargo, Efes acumulaba fallos en ataque y pérdidas que denotaba que estaba viviendo sus horas más bajas sobre el parquet.

Los turcos se acercaron sin darse cuenta

El Madrid aprovechó el bajón y Hanga, con un triple demoledor, puso la puntilla a una ventaja que el Madrid debía de cultivar, ya que Efes es un equipo que no puedes darle una segunda opción (40-31).

El aro escupía los triples del equipo de Laso y los árbitros castigaron a Tavares con la tercera falta que le llevó al banquillo a tres minutos del final del cuarto. A base de tiros libres Efes se acercó al marcador casi sin darse cuenta ( 40-38).

La tensión se apoderó de ambos equipos y saltó por los aires cuando Anderson empujó a Rudy y Poirier fue a pedirle explicaciones. La acción se quedó en reparto de antideportivas y balón para los blancos. Acababa el tercer cuarto y la mejor noticia era que los merengues seguían arriba en el marcador (42-40)

Ya en el último y decisivo cuarto, Micic despertó cuando su equipo más lo necesitaba. Ni siquiera la intimidación de Tavares hizo que se le hiciera de noche y Singleton y Pleiss apuntalaron la remontada de su equipo que aprovechaba el bajón de los blancos al inicio del último periodo (44-47).

Poirier volvió a ser Poirier y taponó a Pleiss y el aeroplano de Mahón volvió a ser El Increíble Llull para devolver la ventaja a los blancos con un triple de aquellos que levantan al respetable (50-49)

Efecto Pleiss

A falta de tres minutos para el final, Pablo Laso tuvo que parar el encuentro porque el equipo de Ataman se subió a los hombros de Pleiss para que con cuatro puntos seguidos puso a su equipo tres arriba (50-53)

Gaby Deck, que regresó de la NBA para volver a sonreír, empató el encuentro a dos minutos del final (53-53). Sin embargo, Micic, que disfruta como nadie los últimos minutos, respondió desde más allá de 6,75. Lo que acertaban los turcos desde la línea de tres lo fallaban en el rebote ofensivo, una estadística a la que los blancos se agarraban para mantenerse en el partido.

Llull con una canasta de coraje acercó a un punto a los blancos a falta de 44 segundos. Sin embargo, el marcador no se movería y los blancos se quedaron a un paso de la gloria . Un duro final para un equipo que había tejido la historia perfecta para hacerse con el título.