España no tiene fin en baloncesto y alcanza de forma heroica las semifinales del Eurobasket

Con un gran Willy Hernángomez, con 27 puntos sostén de una España heroica, la selección de baloncesto se ha clasificado para las semifinales del Eurobasket tras derrotar a Finlandia en un igualadísimo partido de cuartos (100-90) en el que España llegó a ir perdiendo de 15, pero con la garra de siempre, pese a que la mayoría son novatos, remontaron la situación para regalar otra semifinal al deporte español. Este equipo, desde hace ya tres lustros, no se baja de la brillantez juegue con quien juegue.

Es increíble como la España de baloncesto -la España de Scariolo- compite en cada torneo y especialmente en situaciones duras. A este Eurobasket llegamos con un equipo en clara transición, sin grandes expectativas, y estamos ya en semifinales, en la lucha por las medallas, en el momento donde se encienden los focos. La España de baloncesto es inmortal sean nuevos o viejos. Es una máquina de competir, es un milagro lo que consigue Sergio Scariolo. La victoria ante Finlandia se cimentó en la creencia de que este equipo nunca tiene fin.

Con lo bien que empezó el partido, con un 8-2 inicial con Willy Hernángomez avisando, y lo mal que terminó el primer cuarto. Finlandia fue minando la moral de los españoles sin la necesidad de que apareciera en exceso Lauri Markkanen, figura emergente de este Eurobasket anotando hasta 43 puntos en el partido de octavos ante Croacia. A España, eso sí, al final nos metió 28. Con 9-12 abajo Scariolo pidió un tiempo muerto para intentar acabar con la sangría finlandesa. No lo consiguió y con un parcial de 2-11 los nórdicos comenzaron a despegarse. Un triple de Koponen puso en alarma a España, que en ese momento perdía de diez (17-27) y que finalizó el primer cuarto de la peor forma, con una canasta descomunal desde el centro de la pista que dejó a España once abajo (19-30).

Con un triple de Alberto Díaz (22-32) los nuestros quisieron reaccionar, pero faltaban cosas. Tuvo Rudy dos fallos seguidos y España erraba en ese momento prácticamente en todo, especialmente en el rebote ofensivo donde no se cogía ni uno. Si los de Scariolo no acertaban en el triple, Finlandia desangraba a España sobre la línea de tres. Un triple de Huff puso a Finlandia +13 (31-44) y esa distancia hasta sabía bien si contamos que minutos después los finlandeses se llegaron a poner +15 (35-50) después de que Salin anotara otro triplazo. Fue ese punto el peor de esta España que lucha contra sus propias expectativas y la limitación que tiene en ella. Se levantó de esa situación aupado por tres puntos de Juancho Hernángomez y fue tímidamente recortando hasta terminar el segundo cuarto España nueve abajo (43-52) aunque con sensaciones malas.

Con un protagonismo total de Willy arrancó el tercer cuarto. Hizo un mate, metió otra canasta, anotó dos tiros libres... y cometió una antideportiva. Él solo puso la distancia a cuatro (49-53) en un punto de inflexión. Un canastón de Brown apretó más el resultado (51-53), pero reaccionó bien Finlandia con Markkanen. El partido ya era de igualdad total y España dio el sorpasso con un triple de Joel Parra (60-57) y especialmente con la impresionante figura de Willy, que estaba a todo, desde canastas a rebotes. Firmaba 23 puntos con 16 minutos jugados (acabó con 25). Su hermano, Juancho, se inventó otro triple en la reconciliación española con la línea de tres. Se puso nervioso Scariolo, al que le indicaron técnica por protestar una canasta de Markkanen que no debía haber valido. Eso volvió a colocar a Finlandia por delante, pero Willy -quien si no- recuperó el triunfo momentáneo para España (67-65). Un tapón de Garuba derivó en un triplazo de Rudy, capitán de un equipo ante al que hay que ponerse en pie, y después otro de Brizuela dieron a España la mayor distancia de todo el partido, +8 (73-65). Con una canasta de Markkanen -ya muy entonado- terminó un tercer cuarto primordial de España.

Emergió ahí la figura de Brizuela con siete puntos consecutivos muy necesarios. A Finlandia le fallaron las fuerzas -y las manos- y un triple de Garuba puso un 80-73 que nos engañó que podría ser tranquilizador. Los finlandeses no le perdieron la cara al duelo, aunque ya iban a remolque. Se llegaron a poner a dos (82-80 y 84-82) pero otro triple de Brizuela calmó a Scariolo (87-82). España estuvo brillante en los momentos más tensos y eso que la mayoría del equipo son novatos en estas lides. Rudy quiso también la gloria con dos triplazos que pusieron ya a España con once de ventaja (95-84) a falta de dos minutos. Ya estaba ahí hecho, la victoria se tocaba. Alberto Díaz anotó otro triple y con una canasta de Juancho Hernángomez se llegó a los 100 puntos. Ese fue el final: 100-90. Triunfo de honor, enorme con remontada y para ponerse siempre en pie con una selección legendaria.