El arbitraje español sufre otro revés en la Eurocopa y evidencia que está a años luz de otros países
Cuatro de los cinco árbitros que partieron hacia Alemania vuelven a casa, incluido Jesús Gil Manzano después de arbitrar sólo un partido
La Inteligencia Artificial predice el ganador de la Eurocopa alcanzados los octavos y España no es la favorita
Una vez finalizada la fase de grupos de la Eurocopa 2024, la UEFA ha hecho una limpieza de árbitros de cara a esta nueva fase final que comprende desde octavos hasta la gran final el próximo 14 de julio en Berlín.
Una vez más la máxima entidad del fútbol en Europa y organizadora del torneo ha 'castigado' a los colegiados españoles en la Eurocopa, sufriendo el arbitraje español otro revés. A la competición llegaron cinco árbitros españoles, de los cuáles tan sólo uno fue designado árbitro principal. Se trata de Jesús Gil Manzano, quien cometió un grave error durante el Francia - Austria al no detener el choque cuando Mbappé se rompió la nariz. Esa acción le ha costado la Eurocopa.
El árbitro extremeño acumula 12 temporadas en Primera División, con 232 partidos arbitrados, y posee una gran experiencia en la Champions League, donde ha arbitrado 22 encuentros. Le acompañaron a Alemania sus asistentes Diego Barbero Sevilla y Ángel Nevado Rodríguez, además de dos representantes españoles que se designaron para estar en la sala VAR; Alejandro Hernández Hernández y Juan Martínez Munuera.
Los colegiados españoles vuelven a casa
Pues bien, de los cinco que partieron hace dos semanas para dirigir partidos en Alemania, todos vuelven a casa excepto uno. Gil Manzano no volverá a dirigir ningún encuentro de la Eurocopa. Ni él, ni sus asistentes, ni tampoco Hernández Hernández desde el VAR. Tan solo se quedará para los octavos de final Martínez Munuera, considerado por muchos como uno de los mejores árbitros del VAR.
De hecho, Jesús Gil Manzano se despide de la Eurocopa después de arbitrar sólo un partido en esta Eurocopa. Fue el encuentro entre Francia y Austria de la primera jornada del Grupo D. Gil Manzano estuvo envuelto en polémica por la acción con Mbappé antes mencionada, pero también por el gol en propio de Austria, que llegó precedido de un saque de puerta para Francia que debió haber sido córner para los de Ragnick. Noche para olvidar la que tuvo el español.
La UEFA le castigó y no dirigió ningún partido más de la fase de grupos de esta Eurocopa. Tan solo participó como cuarto árbitro en el choque entre Turquía y Portugal de la segunda jornada de grupos.
Sustituto de Mateu Lahoz
La retirada de Antonio Miguel Mateu Lahoz, el árbitro que había sido elegido para representar a España anteriormente, llevó a Gil Manzano, de 40 años, a participar en su segundo gran campeonato internacional tras su actuación en la Copa América en 2021. Además, es uno de los colegiados internacional mejor valorados por parte del Comité Técnico de Árbitros (CTA).
Un revés para el arbitraje español
Esta decisión de la UEFA supone un mazado y otro revés para el arbitraje español. La UEFA deja clara su opinión sobre el nivel de los árbitros de España comparado con el de otros países, evidenciando que está a años luz de otros colegiados europeos. Por ejemplo, trencillas como Michael Oliver o Szymon Marciniak, que ya han pitado dos partidos en esta primera fase de la Eurocopa, y volverán a dirigir en los octavos de final.
El arbitraje y los árbitros en España no atraviesan su mejor momento, ya que el resto de las grandes ligas (Inglaterra, Alemania, Italia o Francia) ha tenido dos representantes en la Eurocopa. Su nivel deja mucho que desear y ya es la segunda vez consecutiva que sufre un revés de este calibre, pues recordemos que en Qatar 2022 sucedió con Mateu Lahoz. El colegiado valenciano aparecía como uno de los grandes favoritos para dirigir la final, pero su nefasta actuación en el Países Bajos - Argentina de cuartos de final lo mandó para casa antes de lo deseado. Ni FIFA ni UEFA confían ahora mismo en los árbitros españoles.
Además, no se pueden pasar por alto los escándalos por los que se han visto salpicados como el caso Negreira o la corrupción en la RFEF. Dos temas que generan desconfianza por parte de todos los grandes organismos del fútbol hacia el arbitraje español.