Fórmula 1
«¿Qué me estáis haciendo este año?»: Fernando Alonso ya sospecha de sabotaje en Alpine
Enésimo cabreo del piloto español tras las decisiones de su equipo en el Gran Premio de Japón
«Qué error, eh, digo estratégicamente, ¿qué me estás haciendo este año?». La pregunta de Fernando Alonso retumbó en el box de Alpine. Eran las últimas vueltas del esperpéntico Gran Premio de Japón, ese con el que los organizadores de la Fórmula 1 demostraron su pánico a hacer carreras mientras cae lluvia. Cuando ya la carrera se contaba por minutos y no por vueltas -para no pasar el máximo legal de las tres horas- Fernando Alonso se defendía de Sebastian Vettel (que iba con el monoplaza que tendrá la próxima temporada el español) y Alpine le metió en boxes para cambiar neumáticos, poner unos nuevos y así intentar ganar posiciones. Al final la perdió: quedó detrás de Vettel por milésimas.
El Gran Premio de Japón fue una cita difícil para Fernando. Salió séptimo y tras el parón de la carrera mantuvo la plaza en la que estaba, sexto, posición ganada por el accidente de Carlos Sainz. Tras retomarse la prueba llegó a colocarse líder durante una vuelta, aunque esa situación tenía trampa: todos los pilotos habían entrado a cambiar los neumáticos de extrema lluvia por los intermedios y él no lo hizo porque no podía. Ocon, que iba delante, entró y si Alonso lo hubiera hecho hubiera tenido que esperar más tiempo entre que los mecánicos acaban con un coche y se ponen con el otro. Y esa decisión de Alpine era la correcta: Ocon iba delante y tenía prioridad.
Sin embargo, en otras ocasiones la escudería francesa se volvió a equivocar por completo. «Siempre paramos tarde las veces que decidimos entrar. Al principio estaba solo con los neumáticos de lluvia extrema y perdimos varias posiciones. Y al final hicimos una parada extra, pero solo a seis vueltas del final y no era momento para hacer diferencias», explicó tras la carrera Fernando. Ahí está la clave, en esa última parada. Entró a boxes cuando quedaba muy poco de carrera y aún así él se fue quitando pilotos hasta que llegó a la sexta plaza, que no fue capaz de recuperar ante Vettel. Alpine calculó mal los tiempos: si hubiera dado tiempo a una vuelta más si hubiera adelantado.
El asunto es que en ambas paradas que hizo el asturiano en los 40 minutos que duró la carrera el piloto pidió hacerlas antes. «Estaba pidiendo entrar a boxes antes en ambas ocasiones, pero hoy mi micrófono quizás no funcionó», dijo en tono de crítica. El mensaje era claro: Alpine ni le hizo caso, porque el micro de la radio para conectar con el equipo sí funcionaba. De ahí que se recurra a la idea de sabotaje. «Al final quedamos en el mismo sitio que donde salimos», añadió.
La relación con Alpine está ya rota. Les quedan a ambas partes cuatro carreras que se harán muy largas, aunque el equipo lucha con McLaren quedar por delante en el Mundial de Constructores. La tensión es tal que al anunciar a Gasly como nuevo piloto, Otmar Szafnauer, jefe de Alpine, dijo que Alonso «no reúne los requisitos» por los que ficharon a Gasly: «joven, experimentado y rápido».
Alonso también añadió que «dentro del coche se sintió un poco de caos dentro del equipo» ya que «no sabíamos si era la última vuelta de carrera» y que Alpine le avisó que era así «en la última curva».