Así entrena Fernando Alonso los reflejos
El piloto español se prepara para la exigente temporada de la F1, la primera con Aston Martin
Queda ya menos de un mes para ver a Fernando Alonso, por primera vez, con el nuevo coche que le espera en su nueva aventura en la Fórmula 1. El piloto español tiene en este 2023 un reto más en su carrera: debutará con Aston Martin, la escudería británica que le fichó para, al menos, los dos próximos años.
Será el 13 de febrero cuando se presente el 'AMR23', el monoplaza de Aston Martin para la temporada 2023. Ese día será la primera vez que se vista, de forma mediática, Alonso con los colores verdes de su nuevo equipo. Eso sí, antes –el 7 y el 8 de febrero– ya correrá con Aston Martin en Jerez, donde comenzará 'La Misión', aunque será con el coche de la temporada pasada.
La temporada de F1 de este año arranca el fin de semana del 3 al 5 de marzo en Baréin (donde se celebrarán, una semana antes, los test oficiales de preparación), pero eso no quiere decir que ahora Fernando Alonso esté sin hacer nada. Todo lo contrario. El asturiano está haciendo una pretemporada personal con entrenamientos diarios que comparte de forma habitual en sus redes sociales. Esa es una de las clave de su espectacular estado de físico. Tiene ya 41 años y hasta personas que le conocen tan bien como Briatore le dicen que está mejor que cuando fue campeón del mundo (2005 y 2006).
Fernando Alonso está entrenando al máximo nivel y compaginando los ejercicios puramente físicos con actividades como el fútbol, los karts o montar en bicicleta. Y lo que ha hecho ahora ha sido compartir un preciso ejercicio de reflejos, algo clave en la Fórmula 1. Conducir un monoplaza de este tipo requiere de una exigencia física y también de estar pendiente de todos los detalles posibles. Los reflejos son vitales en cualquier momento de la carrera.
Así, Alonso ha compartido un entrenamiento este jueves en el que se le ve muy bien de reflejos. En concreto, el ejercicio consiste en dar (pulsar) la luz verde –color representativo de su nueva escudería– en cuanto sale en pantalla. Fernando tiene delante de él 12 pequeñas pantallas (una especie de cámaras fotográficas) y se van encendiendo, con ese color verde, de forma alternativa.
Con ello, el piloto tiene que dar a la pantalla exactamente en el que se ilumina la cámara, algo que se alterna en un segundo. Y Alonso demuestra tener bastantes reflejos al adivinar y acertar todas y cada una de las luces que salen en un esfuerzo más visual y de atención que físico. Todo ayuda para estar preparado para la exigente temporada de F1 que toca afrontar este año, la más larga de la historia.