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Ben Sulayem, presidente de la FIA, junto a Horner, jefe de Red Bull, y Verstappen, campeón del mundo de F1

Ben Sulayem, presidente de la FIA, junto a Horner, jefe de Red Bull, y Verstappen, campeón del mundo de F1Red Bull

La guerra oculta por el control del millonario negocio de la Fórmula 1

Las disputas entre la Federación Internacional y la propia F1 vienen de lejos por varias disputas con mucho dinero de fondo

La Fórmula 1 y la FIA se encuentran en pleno conflicto. Los primeros son el deporte propiamente dicho y los segundos la Federación Internacional de Automovilismo, de quien dependen todas las competiciones del motor. Son varias las disputas públicas que se han producido entre estas dos entidades de colosal tamaño con el presidente de la FIA, Mohamed Ben Sulayem, como protagonista: prohibiciones de joyas en los monoplazas, el nuevo código ético o la publicación del calendario de la temporada que ya ha empezado sin aviso previo a la F1.

El fuego que prendió la mecha fue la posibilidad de una nueva llegada de equipos a la categoría reina del automovilismo. Sin embargo, el detonante real de esta ‘guerra’ resultaron ser las reacciones del presidente de la FIA, en sus redes sociales, a una posible venta de la Fórmula 1 por parte de Liberty Media, empresa que compró la F1 en 2017 por 4.400 millones de dólares.

La primera gran polémica con Mohamed Ben Sulayem llegó durante la jornada de descanso del Rally Dakar 2023, en la que en unas declaraciones abrió la puerta a la entrada de nuevos equipos en la Fórmula 1, algo que no ha resultado de gran agrado para la F1, a pesar de entrar la posibilidad en el Pacto de la Concordia con vigencia hasta 2025. Esta situación se debe a que implicaría un descenso en el porcentaje de ingresos de las escuderías al haber más equipos entre los que repartir el dinero, factor diferencial en el automovilismo.

La Federación Internacional de Automovilismo ha abierto el proceso para valorar la entrada de posibles equipos, hasta el 30 de abril, como puede ser Panthera Asian Team o Michael Andretti en su alianza junto a General Motors, una elección en la que la F1 tendrá gran peso con el fin de mantener la competitividad en la categoría reina del automovilismo.

La Fórmula 1, ¿a la venta?

La relación entre FIA y F1 se puso fea con la reacción en redes sociales de Ben Sulayemn a los rumores de una oferta de compra por un fondo de inversión saudí, de 20.000 millones de euros el pasado 20 de enero.

El presidente de la FIA consideró que el precio de dicha oferta estaba «inflado». «Cualquier posible comprador debería usar el sentido común, considerando la grandeza del deporte y llegar con un plan claro y sostenible, no solo con mucho dinero. Es nuestro deber considerar el impacto futuro para los promotores en cuanto a la disminución de las tasas y otros costes comerciales», añadió Ben Sulayem.

Liberty Media y F1 respondieron con firmeza al presidente de la FIA, a través de una carta de carácter legal firmada por la consejera general de la junta de administración de la F1, Sacha Woodward Hill, y responsable legal de Liberty Media Corporation, Renee Wild. «Fórmula 1 tiene los derechos exclusivos de explotación y de los derechos comerciales del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 de la FIA. Además, la FIA ha dado su compromiso inequívoco de que no hará nada que perjudique la propiedad, gestión y explotación de esos derechos», relató la carta.

«Consideramos que los comentarios vertidos por el presidente de la FIA en su cuenta oficial interfieren de forma inaceptable en esos derechos», continuó la carta de Liberty Media y F1.

¿El adiós de Ben Sulayem?

Según publicaciones del medio británico Daily Mail, Mohamed Ben Sulayem habría expuesto, en una carta a los equipos de F1, su decisión de delegar sobre Nicholas Tombazis el contacto diario de la categoría reina del automovilismo y centrarse así en los objetivos estratégicos de la FIA. «Mi objetivo declarado es ser presidente, no ejecutivo de la FIA», expresó en su carta Ben Sulayem.

El presidente de la FIA Mohamed Ben Sulayem abrazando a Sebastian Vettel en el GP de Abu Dabi 2022

El presidente de la FIA Mohamed Ben Sulayem abrazando a Sebastian Vettel en el GP de Abu Dabi 2022GTRES

«Por tanto, en el futuro, su contacto diario para todos los asuntos de la Fórmula 1 será con Nicholas Tombazis, el responsable de la comisión de monoplazas, y su equipo, mientras que yo me centraré en asuntos estratégicos con mi equipo de liderazgo», agrega en la carta. Esto es una parte más de una guerra en la F1 que no es muy visible para el aficionado pero que está en el fondo del deporte, muy jugoso para poder controlarlo.

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