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Michael Schumacher, con el mono de Ferrari, en su etapa de piloto de F1GTRES

Un neurocirujano considera «imposible» que Schumacher estuviera en la boda de su hija

El estado de salud de Michael Schumacher es una incógnita. Ya han pasado más de 11 años de aquel fatídico accidente en Los Alpes, en el que perdió el control de los esquís y en el que se chocó contra una roca, le arruinó la vida por completo. Desde entonces, la familia ha optado por mantenerse en silencio y no ha querido desvelar ningún tipo de detalle sobre cómo se encuentra el campeón de siete Mundiales de F1.

El diagnostico oficial fue que Schumacher había sufrido un traumatismo craneoencefálico con coma que requirió una operación neuroquirúrgica de inmediato. Como forma de preservar la intimidad del expiloto alemán, sus familiares optaron por mantenerse al margen y nunca quisieron desvelar detalles sobre su estado físico.

La semana pasada se conoció la noticia de que Michael Schumacher había acudido a la boda de su hija Gina, ceremonia que desató todo tipo de rumores. Una de las noticias más notorias es que los invitados no podían utilizar el teléfono móvil como medida de privacidad y así evitar cualquier tipo de filtración a los medios de comunicación.

La prensa alemana aseguró que el expiloto había estado presente en el enlace nupcial de su hija. Sin embargo, Jussi Posti, un reputado neurocirujano del Hospital Central de la Universidad de Turku, consideró casi imposible que Schumacher hubiera asistido a la boda de su hija en Mallorca.

«Si se ha construido un hospital personal a su alrededor no creo que lleve una vida muy activa. Como paciente en cama, muchas personas se vuelven tan frágiles y rígidas que después de muchos años ya no es posible levantarlas desde los pies de la cama», comentó el neurocirujano.

«Los medios médicos para tratar lesiones cerebrales como la de Schumacher todavía son escasos. Actualmente se están probando en todo el mundo la terapia de regeneración cerebral y la terapia de trasplante de células como métodos nuevos, pero la investigación llevará mucho tiempo. En este momento todavía no es posible decir si se trata de formas de tratamiento que ayudarían a los pacientes a mayor escala, sin mencionar que terminarían siendo herramientas de atención médica durante muchos años», expuso Posti.

La forma de descubrir si esas filtraciones de noticias son ciertas es preguntar a la familia del excampeón, pero teniendo en cuenta que llevan 11 años sin decir nada, resulta altamente improbable que vayan a desvelar más detalles.