Jesús Portillo, psicólogo deportivo: «Vivir estresado durante mucho tiempo aumenta la probabilidad de lesión»
Jesús Portillo, psicólogo deportivo y socio fundador de Psicologos del Deporte Online, indica que «cuando los deportistas apuestan todo a su identidad deportiva y viene una mala racha», pueden venirse abajo
Jesús Portillo, psicólogo del deporte y socio fundador de Psicologos del Deporte Online, ha hablado con El Debate sobre la psicología en el deportista de élite y, en especial, sobre el caso concreto de Eden Hazard. El belga lleva una temporada irregular con el Real Madrid, suplente y ausente en casi el 70 % de los minutos totales de su equipo.
–¿Puede un deportista profesional verse afectado mentalmente y que esto le repercuta en su estado físico?
–Por supuesto que un deportista profesional puede sentir malestar psicológico. A veces se olvida que únicamente son personas a las que se les da mejor que a otras hacer una actividad en concreto. ¿Por qué no van a sentir las mismas sensaciones de malestar psicológico que podemos vivir el resto de los mortales?
Y por supuesto que cuando un deportista no se encuentra bien psicológicamente, este puede ver una consecuencia en su físico.
–¿Podría llegar a tener lesiones por ello? ¿Cómo puede evitarlo o prevenirlo el deportista profesional?
–Si el malestar es mantenido en el tiempo, puede conllevar que aparezca algún tipo de lesión. Por ejemplo, existe una correlación entre el hecho de vivir con altos niveles de estrés mantenidos en el tiempo, y la probabilidad de tener algún tipo de lesión muscular. Sin duda, trabajar a nivel preventivo para rebajar esos niveles de ansiedad siempre será más oportuno que trabajar posteriormente para recuperar a un deportista lesionado.
–Centrándonos en Eden Hazard, ¿podría ser la presión, el cambio de ciudad, sus hábitos o el estrés los que le estén afectando mental y físicamente?
–No conocemos el caso de Eden Hazard de primera mano para poder afirmar qué es lo que le ocurre. Pero sí que podemos decir que es muy habitual que cuestiones como el cambio de ciudad, idioma, alimentación, costumbres... suela afectar la persona, que en este caso practica deporte. El problema es que esas transiciones se viven como un proceso de cambio en el cual la persona ha de adaptarse a ese nuevo entorno, y en el deporte de alto rendimiento a veces no hay lugar para ese espacio de tiempo.
–¿Cómo se fortalece la ‘cabeza’ de un profesional en un club competitivo, con estrés y una presión alta?
–Lo ideal es trabajar a nivel preventivo. Que el deportista sea consciente de la repercusión que tiene su vida profesional deportiva, pero que a la vez no entienda que su vida profesional lo es todo para él o ella. Cuando los deportistas apuestan todo a su identidad deportiva, es fácil que las barreras propias de la profesión (lesiones, malas rachas, no renovar con un club, excesiva presión...) todo se viva de una manera mucho menos saludable.