Morata-Joao Félix, conexión letal: Simeone sueña con la mejor dupla de sus 10 años en el Atlético

El Atlético de Madrid de Simeone siempre se ha caracterizado por ser un equipo que le saca la máxima rentabilidad a sus goles. De hecho el 1-0 es el resultado más repetido en la era Simeone. Los colchoneros siempre se han sentido cómodos en marcadores ajustados, aunque esto los ha llevado a cosechar numerosos empates a cero.

Sin embargo parece que ese Atleti ya es historia. El equipo rojiblanco sufre sin el balón, algo que antes no le pasaba, y se siente a gusto cuando lo tiene, cuando en temporadas anteriores era partidario de ceder la iniciativa al equipo rival. Simeone ha tenido que reinventarse para adaptarse a las características de los jugadores que tiene ahora en la plantilla.

Joao Félix arranca este curso como el jugador franquicia del Atleti y en su cuarta temporada de rojiblanco por fin ha conseguido ganarse el cartel de indiscutible y si las lesiones le respetan debería consagrarse como uno de los mejores jugadores del mundo, justificando los más de 120 millones de euros que desembolsó el Atleti en el verano de 2019.

A Simeone le gusta jugar solamente con dos delanteros y, a pesar de haber hecho pruebas con tres, salvo en algún partido puntual, el esquema de 'El Cholo' contará solamente con dos puntas. Con Joao ya como titular indiscutible, queda una plaza libre para cuatro jugadores (Griezmann, Morata, Correa y Cunha) y por ahora Morata parte con ventaja gracias a su buena conexión con el portugués.

Morata empezó la pretemporada como el quinto delantero y en la rampa de salida y teniendo siempre en el recuerdo sus roces con Simeone en la primera época del madrileño como rojiblanco. Todo ello hacía que el técnico argentino no viera con malos ojos la salida del delantero. Ahora las cosas han cambiado, la humildad y el trabajo de Morata han gustado mucho a Simeone y espera que se quede en el equipo. «Todos los que estamos en el club esperamos que Morata siga con nosotros», dijo Simeone en la rueda de prensa posterior al partido contra el Getafe, brillantemente ganado por el Atlético gracias a la conexión letal: Morata-Joao.

Joao y Morata pueden formar una de las mejores duplas desde que está Simeone en el Atlético. La increíble visión de juego del portugués sumado al olfato goleador del español hacen que ambos se complementen a la perfección y que el Atleti pueda presumir de tener una de las mejores delanteras del campeonato, pues además jugadores como Griezmann, Cunha o Correa serían titulares indiscutibles en muchos de los grandes clubes de Europa.

Sin embargo, a pesar de que Morata-Joao se perfile como la delantera titular en este inicio de temporada, ninguno de ellos debe relajarse, pues los otros tres delanteros que tiene el Atleti en nómina van a trabajar duro para tener un sitio en el once, y posiblemente Simeone más pronto que tarde les de una oportunidad. En Griezmann confía mucho y siempre ha insistido en que se queden Correa y Cunha, del que se acaba de rechazar una potente oferta del Manchester United.

Griezmann-Joao partía como la favorita

El cambio de actitud de Joao Félix en el Atleti no se puede explicar sin Griezmann, ya que desde que el francés volviese al club rojiblanco él y Joao se han vuelto inseparables. Y es que a pesar de que 'El Principito' se podía pensar que venía a ser la competencia directa para el portugués, la realidad es que ambos han congeniado muy bien y desean marcar una época jugando juntos.

Además, Simeone siempre ha mostrado devoción por Griezmann e hizo todo lo posible por su vuelta. El técnico argentino trata de encajar al francés en el esquema, pues sabe que es un jugador diferencial y está convencido de que recuperará el nivel que le hizo estar entre los tres mejores jugadores del mundo en el año 2018.

El Atleti y Simeone tienen el mejor ataque posible, con multitud de posibilidades, y ahora la tarea difícil es conseguir que estén todos enchufados y contentos con el rol que tengan. No será sencillo, aunque la situación similar de la pasada temporada sirve como experiencia para no volver a cometer los mismos errores.