España sigue cicatrizando sus heridas con una clasificación perfecta

La selección española femenina de fútbol superó de manera contundente a la de Ucrania (5-0) y de esta manera puso el broche a una clasificación impoluta para el Mundial de 2023, con pleno de victorias en su grupo, 53 goles a favor y ninguno en contra.

Ese era el reto que se habían marcado en la previa las jugadoras y el seleccionador español, también para marcharse con buen sabor de boca de una concentración en la que se ha escenificado un ambiente de tensión entre ambas partes que al menos de puertas afuera parece irse rebajando.

Han ayudado a ello los tantos, tres en el duelo previo contra Hungría y los cinco ante las ucranianas durante noventa minutos en los que las anfitrionas fueron muy superiores, hasta el punto de haberlo dejado ya todo encarrilado en la primera parte. El descorche lo puso Zornoza, con un disparo desde fuera del área que rozó la escuadra. Y a partir de ahí se desbordó la espuma. Esther, que previamente había fallado un mano a mano, no perdonó el segundo que tuvo.

Tampoco escatimó en acierto Alba Redondo, que primero de cabeza y luego con un disparo desde la frontal que tocó en una contraria puso las dos siguientes dianas. Esther de nuevo, mediante una internada por el costado izquierdo definida de manera contundente, transformó el 4-0 antes del descanso. Con todo decidido, tras el paso por vestuarios España volvió insistente pero menos incisiva, sin necesidad de hacer más daño pero confiada en que la inercia le daría opciones de ampliar aún más la renta.

Lo lograron mediante un penalti anotado por Jenni Hermoso después de que fuese derribada dentro del área Olga Carmona. Pudo haber algún tanto más, pero la arquera visitante y un palo, que le negó el sexto a Amaiur, lo evitaron. A partir de este momento España dejará de lado los partidos oficiales y se centrará en sacarle el mayor jugo posible a los amistosos que tiene por delante de cara al Mundial para pulir sus defectos y sanear el ambiente.