Boris Johnson, en una imagen de archivo
Boris Johnson intermedió con Arabia Saudí para la compra del Newcastle
Encargó a un ministro que se encargara de que este proceso -la adquisición del club por parte de este país- saliera adelante
Boris Johnson, exprimer ministro de Reino Unido, intermedió con representantes de Arabia Saudí para que compraran el Newcastle, club inglés que milita en la Premier League. Y lo consiguió, porque este equipo es propiedad ya de jeques de este país de Oriente Próximo que han metido mucho dinero.
En concreto, tal y como desvela el periódico The Guardian, el Gobierno de Reino Unido bajo la presidencia de Johnson facilitó la adquisición de este grupo saudí. Gerry Grimstone, entonces ministro de inversiones, pidió a los directivos de la Premier League en agosto de 2020 que abriera la posibilidad a que Arabia Saudí se hiciera propietaria del Newcastle para que así después pudieran transmitir al gobierno de este país un «camino a seguir» en la entrada en la Premier que ya había sido propuesto por «los más altos niveles del gobierno saudí».
Johnson designó a Grimstone, exbanquero con muchos contactos en Arabia Saudí, como enlace para que se acelerara el proceso de compra del Newcastle, algo que también interesaba al Gobierno en sus relaciones con Arabia Saudí. Así se devela en los documentos a los que ha accedido The Guardian, en los que muestran a este ministro trabajando continuamente en el proceso de adquisición del Newcastle, poniendo en contacto a al Premier League y al Gobierno de Arabia Saudí. Hay que recordar que Boris Johnson dijo en respuesta parlamentaria que su gobierno «no estuvo involucrado en ningún momento en las conversaciones de adquisición sobre la venta de Newcastle
Los documentos ahora publicados le desmienten y consisten en cuatro comunicaciones que Grimstone envió en agosto de 2020 a Neil Crompton, embajador del Reino Unido en Arabia Saudí, y a dos funcionarios no identificados en Downing Street, informándoles de su contacto con Gary Hoffman, presidente de la Premier League. Se incluyen mensajes de WhatsApp y tres llamadas telefónicas. En esos papeles se manifiesta además que si estos documentos se hacen públicos las relaciones internacionales del Reino Unido «se podrían ver gravemente perjudicadas».