El polémico gesto de Lewandowski tocándose la nariz tras su expulsión ante Osasuna
El delantero polaco se marchó la vestuario tras ver la segunda tarjeta amarilla. En su camino al vestuario, las cámaras grabaron el enfado del jugador
El delantero Robert Lewandowski no ha tenido hoy su mejor día como culé. El futbolista polaco, máximo goleador de la Liga, fue expulsado por doble amarilla y dejó a su equipo con diez ante Osasuna. La primera tarjeta la vio tras un agarrón y la segunda tras alcanzar con el antebrazo a David García. Y todo antes del descanso.
La decisión de Gil Manzano fue muy discutida por la plantilla culé. Si bien la primera tarjeta fue dudosa, lo cierto es que en la segunda acción el delantero golpeó con el antebrazo en la mandíbula al capitán de Osasuna.
Una vez expulsado, el futbolista emprendió el camino al vestuario visiblemente enfadado. En ese momento, las cámaras captaron a Lewandowski llevándose el dedo a la nariz y señalando irónicamente al colegiado. Inmediatamente, la imagen se viralizó en redes sociales, generando una intensa polémica.
Los primeros en comentar la jugada pensaban que el delantero polaco estaba insinuando que Gil Manzano había consumido alguna sustancia por la nariz. «Lewandowski insinuando que el árbitro está drogado. Yo quiero imaginar que le van a caer no menos de 6 partidos por esta vergüenza», escribía uno. «Lewandowski interpretando que el árbitro va hasta arriba», decía otro.
Sin embargo, de acuerdo con otras versiones como la aportada por el excolegiado Iturralde González, este gesto en Alemania (llevarse la mano a la nariz alzando el rostro) quiere decir arrogancia o soberbia. Es decir, Lewandowski no estaría insinuando que Gil Manzano consume cocaína, sino que peca de soberbia sobre el césped.
En los próximos días sabremos si se abre un expediente para sancionar al delantero del Barcelona. Hace justo seis días, el Comité de Competición abría un procedimiento a Carlo Ancelotti, entrenador del Real Madrid, por decir que un penalti señalado a Asensio se lo habían «inventado».
El Real Madrid alegó entonces una cuestión idiomática para justificar las palabras de su entrenador, algo a lo que quizá podría agarrarse el Barça para evitar una mayor sanción para su futbolista estrella. El Comité de Competición mira con mucho celo toda clase de menosprecio a la labor de los árbitros, así que el tiempo dirá.