Los 11 años y 600 partidos de Simeone en el Atlético: de recuperar al equipo a la incertidumbre actual

El 23 de diciembre del 2011 será una fecha que jamás olvidarán los aficionados atléticos. El club colchonero anunciaba la contratación de Diego Pablo Simeone para lo que restaba de temporada y una más confiándole la dirección del equipo en un momento excesivamente delicado, pues se encontraba más cerca del descenso que de los puestos europeos y los fantasmas de una nueva caída a los infiernos de la segunda división comenzaban a aparecer.

Poco tardó Simeone en revertir la situación y es que, al finalizar esa campaña, el Cholo ya había conseguido levantar la Europa League y se quedó a tan solo dos puntos en LaLiga de acceder a Champions League. El argentino regresó como se fue, siendo un ídolo. Además, por aquel entonces muchos en el Atlético soñaban con tener en Simeone una figura similar a la de sir Alex Ferguson en el Manchester United.

Los éxitos de Simeone

Durante sus primeras temporadas, todos eran triunfos para el Atlético de Madrid de Simeone, que en 2013 logró poner fin a la racha de 14 años que llevaba sin ganar a su eterno rival, el Real Madrid, consiguiendo una histórica Copa del Rey en el Santiago Bernabéu firmando un ejercicio de resistencia que terminó con aquel cabezazo de Miranda en la prórroga.

Al año siguiente se haría con LaLiga, un título que no conseguían los rojiblancos desde 1996. También alcanzó la final de la Champions League y rozó el levantarla, pero el mítico gol de Sergio Ramos en el minuto 93 le privó de una competición que todavía a día de hoy le es esquiva. Ahí vivió su primera decepción como técnico, aunque siguió adelante y al año siguiente se haría con la Supercopa de España.

Milán, primer punto de inflexión

Dos años después de la final de Lisboa, Simeone volvió a llevar a los suyos hasta la final de la Champions, esta vez en Milán, pero nuevamente ante el Real Madrid. En esta ocasión fueron los penaltis los que evitaron que el Cholo lograse el único título que se le resiente y por primera vez dejó en el aire su futuro. «Es un momento para pensar de parte mía. Y en este momento estoy. Me estoy planteando pensar, nada más que eso», dijo Simeone tras la final, dejando unas declaraciones que asustaron a toda la parroquia rojiblanca.

Finalmente optó por seguir con el Atleti y seguramente desde Milán el equipo nunca ha vuelto a demostrar un nivel de competitividad igual aunque ha seguido ganando títulos, una Europa League y una Supercopa de Europa en 2018 y LaLiga en el 2021. Sin embargo, el equipo también ha sufrido numerosas decepciones en Europa, la última y probablemente la más grande la ocurrida esta temporada.

Esta situación ha llevado a muchos aficionados a pedir la destitución del técnico, ya que además consideran que no está siendo capaz de sacar todo el provecho a sus jugadores. En especial el de João Félix, un futbolista que muy cerca ha estado de costarle el puesto al argentino, ya que la directiva ha tenido que escoger entre la continuidad de su técnico o la de su jugador franquicia, pues la relación está rota y parece que será el portugués quien salga de la disciplina en el mercado de invierno.

Precisamente sobre esto habló Simeone en su última rueda de prensa, donde comentó que a pesar de que vaya a hacer once años él tampoco es imprescindible en este equipo. «Quiero lo mejor para el Atlético de Madrid. Hace once años que dejo todo lo que tengo para que el club crezca, me importa solo eso, seguir mejorando, creciendo, ganar, focalizándonos en el partido a partido. Nadie es imprescindible, nadie, las cosas serán como tengan que ser», comentó el Cholo.

Estas palabras van en la línea que ha seguido la directiva del club, que ya habla abiertamente del adiós de João Félix, pero que tampoco confirma la continuidad de Simeone más allá de junio 2024, que es cuando expira su contrato. «Resistirse al cambio es una apuesta segura al fracaso», comentó Miguel Ángel Gil Marín durante la comida de Navidad de la primera plantilla.

Leyenda rojiblanca

Suceda lo que suceda, lo que ya nadie le va a quitar a Simeone es todo lo que ha conseguido en el Atlético. No obstante, hay quien piensa que ahora mismo está muy quemado y que continuando al frente del banquillo lo único que está haciendo es manchar su legado.

Algo que Simeone no comparte, ya que él sigue deseando levantar la Champions League con el Atleti. Está claro que ese es su único objetivo en estos momentos y por ello luchará el tiempo que le quede, algo que en estos momentos nadie sabe con certeza.

«No tengo ninguna duda de que la Champions me cuesta. Me ha costado, entendiendo las dos finales que perdimos, una en los penaltis y otra en la prórroga. Más cerca de ganar una final de Champions que los penales creo que no se está. Soy cabeza dura, muy cabeza dura y voy a seguir insistiendo, hasta que tenga la posibilidad en este club, entrando primero en la Champions y buscando encontrarme con algo que nos falta», comentó Simeone tras caer eliminado de la Champions en fase de grupos esta temporada.