El fantasma del desastre: el Madrid de Ancelotti se parece peligrosamente al de 2015

Dice el dicho que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra. Carlo Ancelotti se acerca a eso. No es que el Real Madrid viva en una alarmante situación, en una crisis, pero sí que existen algunos casos, coincidencias y resultados que hacen pensar que el entrenador italiano puede tropezar con la misma piedra ocho años después.

Ancelotti entrenó al Real Madrid, en su primera etapa, durante dos temporada: 2013-14 y 2014-15. La primera de ellas fue de las más exitosas en toda la historia del club blanco: doblete de Copa y Champions, que se ganaba por primera vez después de 12 años. Eso lo mejoró en su primea temporada de esta segunda etapa, el pasado curso, cuando hizo otra vez doblete pero de Liga y Champions, de más valor si cabe. Otra cosa son las segundas temporadas.

Fantasmas del pasado

En esa está ahora el Real Madrid. Es la segunda temporada de Ancelotti y los fantasmas de la segunda de su primera etapa aparecen. Si Carletto firmó un gran primer gran año en 2014, el segundo fue todo un desastre. No solo no ganó ningún título sino que los fue poco a poco perdiendo lentamente –con más dolor si cabe– y el Barça (de Luis Enrique) ganó el Triplete. ¿Es posible que eso se repita ahora?

Los datos dicen que el Real Madrid de Ancelotti de la 22/23 está repitiendo lo que hizo el Real Madrid de Ancelotti en la 14/15. Hay muchas coincidencias, aunque como todo en el fútbol hay que analizar las cosas dentro de un contexto. No todo son datos, hay que escarbar en las razones, en la plantilla, en más componentes. Pero las estadísticas y los hechos se empiezan a repetir.

En 2015, el peor año del Real Madrid de la última década, el equipo blanco venía de ser campeón de Europa. En 2023 eso también es así. Además se había ganado la Supercopa de Europa por un resultado de 2-0 (en ese caso al Sevilla). Eso, esta temporada, también ha sido así: derrotó por 2-0 al Eintracht de Frankfurt. En esa temporada 14/15 fue líder de LaLiga en gran parte del tramo entre agosto y diciembre, algo que también ha pasado en esta 22/23. El Real Madrid ganó aquella temporada el clásico al Barcelona en el Bernabéu por 3-1, idéntico resultado del presente curso.

Son coincidencias que, eso sí, no explican en su totalidad lo que se está viviendo. Por ejemplo también el Madrid el verano previo a aquella segunda temporada de Ancelotti vendió a su número '14' (Xabi Alonso), algo que se ha repetido este verano con Casemiro. Y esto último, evidentemente, está muy rebuscado. Más allá de hechos que se repiten de forma estadística hay algo que sí preocupa a los madridistas: el equipo se está cayendo de forma física.

De los últimos diez partidos jugados el Real Madrid solo ha ganado cinco y algunos tienen condicionantes. Por ejemplo derrotó al Celtic en un partido en el que los escoceses ya no se jugaban nada en Champions. Una de esas victorias es al Cacereño, equipo de tres categorías por debajo. Otro triunfo es el que se llevó ante el Valencia... en penaltis. Y los otros dos son ante equipos que luchan por la salvación como Cádiz y Valladolid.

A Ancelotti se le cae el equipo

El equipo, justo antes del Mundial y en los partidos siguientes a la cita de Qatar, no está bien. Y eso ocurre en un tramo relevante de la temporada donde no se ganan los títulos pero sí se pueden perder. Ha caído ya en uno, la Supercopa de España, pero esta semana se juega otros dos: juega en Villarreal eliminatoria única de Copa del Rey (si pierde cae eliminado) y el domingo viaja a San Mamés a no tener más distancia con el Barcelona en Liga, que ya le saca tres puntos. Hay que recordar que Ancelotti jamás, en cualquier país de todos los que ha estado, ha ganado dos ligas seguidas.

En 2015 el Real Madrid fue cayendo en la clasificación a partir del mes de enero. Perdió en Valencia nada más comenzar el año, cayó goleado en el Calderón, perdió también en Bilbao y Barcelona, empató ante el Villarreal... en marzo ya lo tenía todo muy difícil, además de ser eliminado por el Atlético de Madrid en octavos de Copa. Eso es a lo que se acerca peligrosamente este Real Madrid de 2023: ya ha perdido en Villarreal, ha perdido un título y ha pasado de ser líder a estar a tres puntos del Barça en Liga. En 2015 llegó a tener ventaja de cuatro puntos a inicios de año y a mediados de marzo –que es cuando se hace el primer parón por selecciones– eran los blancos quien estaban cuatro puntos por debajo del Barça.

En aquella segunda temporada de Ancelotti también hubo un componente que, siguiendo estos fantasmas de aquél 2015, puede ser malo para el Real Madrid: hubo Mundial de Clubes, se jugó en Marruecos y el equipo blanco lo ganó. Se jugó entonces en diciembre (de 2014) y ahora se disputa en febrero. Pero también es en Marruecos y como no puede ser de otra forma el Real Madrid tiene el objetivo de ganarlo. Si lo consigue, lo cual es una gran noticia, habrá imitado esa temporada 14/15 que tan mal recuerdo trae al equipo blanco. Lo que esperan, sabiendo los antecedentes, es acabar con tantas similitudes cuanto antes.