El Barça pagó al vicepresidente del Comité de Árbitros para asegurarse de no tener «decisiones arbitrales en su contra»

El FC Barcelona pagó 1,4 millones de euros (532.728,02 euros en el año 2016, 541.752€ en 2017 y 318.200€ en 2018) a José María Enríquez Negreira, vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA) en esos años, porque «quería asegurarse de que no se tomaban decisiones arbitrales en su contra, es decir, que todo fuera «neutral».

Así lo afirma la Agencia Tributaria en su informe sobre el caso que ha saltado este miércoles en el fútbol español: el Barça pagó al número dos de los árbitros durante tres años –y Bartomeu, expresidente de la entidad, añade que fue desde 2003– a través de una de sus empresas, DASNIL 95 SL.

En el documento se refleja las cantidades que el FC Barcelona pagó a Negreira durante tres años, el último en 2018 hasta el mes de junio, justo cuando se produjo el cambio en la Federación Española. El Comité Técnico de Árbitros depende, aunque es un órgano autónomo, de la RFEF y con la llegada de Luis Rubiales se puso fin a la etapa de Victoriano Sánchez Arminio (era el presidente) y José María Enríquez Negreira al frente del Comité de Árbitros. Llevaban ambos 25 años al cargo del órgano que rige el funcionamiento del arbitraje español. En la actualidad esa figura de vicepresidente, quera más institucional que otra cosa, no existe.

La Agencia Tributaria, en su informe, refleja que Negreira emitió facturas al FC Barcelona por valor de casi 1,4 millones de euros y que el «FCB (FC Barcelona) le pagaba, a través de DASNIL 95 SL, por asesoramiento técnico, pues el FCB quería asegurarse de que no se tomaban arbitrales en su contra, es decir, que todo fuera neutral». Se constata, añade el informe, «como estos pagos dejan de producirse coincidiendo en el tiempo con el momento en el que el SR. Enríquez Negreira deja su cargo en el Comité Arbitral».

Además, el exvicepresidente de los árbitros españoles, en el cargo en el momento en el que se produjeron los pagos del equipo culé, no aportó documento alguno que acreditara que prestaba servicios al Barça. Únicamente se limitó a decir que su trabajo era «asesorar verbalmente al club». Su defensa se basa en que el Barcelona le pagaba para recomendarles cómo se debían comportar los jugadores ante cada árbitro. Esos servicios, que Bartomeu explica que se vienen dando desde 2003 en la entidad, terminaron justo cuando Negreira dejó su cargo en el CTA.

Reacción del actual CTA

Por su parte, el Comité de Árbitros ha querido dejar claro que «el señor Enríquez Negreira no forma parte de ninguna estructura federativa desde el cambio de gobierno llevado a cabo tras las elecciones de 2018». Y es que dentro del proceso de transparencia y cambios federativos con la llegada de Luis Rubiales Negreira dejó el cargo que había ejercido desde 1993 a 2018.

El Comité Técnico de Árbitros lamenta los comportamientos que «puedan ser susceptibles de atentar contra la ética del estamento» y recuerda que «ningún árbitro en activo o miembro de los órganos del CTA puede desarrollar labor alguna que sea susceptible de entrar en conflicto de intereses».

Tanto el Comité de Árbitros como la Federación se ponen a disposición de la Justicia para brindar su máxima colaboración en cualquier tipo de información. Hay que señalar que el caso está siendo investigado por la Fiscalía del Barcelona.

La reacción del Barça

En el club catalán se reconocen esos pagos y explican que este «consultor técnico externo» empezó a suministrar «informes técnicos referidos a jugadores de categorías inferiores» y que después pasó a ampliarse «con informes técnicos relacionados con el arbitraje profesional a fin de complementar información requerida por el cuerpo técnico del primer equipo y del filial, una práctica habitual en los clubes de fútbol profesionales».

Además, y a pesar de que reconocen esos pagos que vienen de la etapa de Bartomeu, el Barcelona ve una mano negra en este caso ya que lamentan que esta información «aparezca justamente en el mejor momento deportivo de la presente temporada».