Toni Kroos se siente importante y renovará con el Real Madrid

Su calidad supera su lógica desventaja física marcada por los años. Su visión del fútbol vence a su sufrimiento cuando es el contrario el que tiene el balón e impone una exigencia biológica que él no puede tener. Rinde bien cuando mantiene el balón en su poder y lo pasa mal cuando solo hay que defender porque el enemigo manda, como sucedió la temporada pasada frente al PSG, el City y el Chelsea.

Esta duda es la que marcaba su retraso en la decisión de su futuro. Pero los hechos demuestran que es un futbolista clave y que lo continuará siendo. Fue suplente en Cádiz. Será titular fijo en Londres. Kroos mantiene su relevancia en el esquema del Real Madrid. Es lo que necesita sentir para renovar.

Esa es la condición que Toni, como le llama el vestuario, puso a la empresa que le paga para continuar un año más, el que será el último de su carrera. Ser fundamental, no suplente de lujo. El Debate lo adelantó el 10 de febrero: Kroos renovará por un año más y se hará público en junio.

El club expuso a Toni que no le pediría más de un año, pero que deseaba que siguiera la próxima campaña porque todavía reúne las condiciones óptimas para dirigir el fútbol del conjunto blanco. Así será.

Maneja el equipo como nadie

Toni, como le denomina hasta su tocayo y compatriota Rudiger, valora el rango que le concede Ancelotti de ser titular aunque los jóvenes de potencia ilimitada jueguen a su lado y pidan su sitio. Un análisis pausado le ha llevado a aceptar la firma por una temporada más con el Real Madrid porque observa que el equipo, su equipo, le necesita para dirigir el fútbol ofensivo y controlar los tempos.

Ancelotti ha definido bien la razón de la supervivencia cualitativa de Kroos y de Modric en un fútbol totalmente físico que anula la clase y la técnica de jugadores como ambos a fuerza de marcajes férreos de hombres que se preparan para impedir que los artistas tengan la pelota. «Nadie maneja los partidos como Kroos, Modric y Benzema, y saber manejar los partidos es muy importante», argumenta con criterio el italiano.

La primera oferta de renovación

La importancia que Kroos tiene para el Real Madrid quedó patente cuando fue el primer veterano en recibir la propuesta de seguir. José Ángel Sánchez le presentó la oferta hace un año. El alemán tuvo la proposición antes que Modric, Benzema, Ceballos, Nacho y Asensio. Su liderazgo para templar, mandar, calentar o dormir los encuentros es única.

Toni meditó su continuidad en el fútbol cuando reflexionó que en los momentos clave de la Champions pasada era relevado por Camavinga o Ceballos. Esa pensamiento nació porque en los duelos frente al Chelsea y el City hizo falta mucho poderío físico para soportar la presión que ambos rivales impusieron sobre el Real Madrid y Ancelotti tiró de Rodrygo, Camavinga y Ceballos para responder físicamente. Con ellos consiguió remontar las dos eliminatorias de manera cuasi milagrosa.

Ser protagonista o retirarse

Esas sustituciones hicieron calibrar al germano que su permanencia en este fútbol moderno era dudosa o al menos debatible.

Kroos y Modric asumen que su manera de jugar al fútbol, con una técnica depurada, no será suficiente en un futuro a corto plazo. Se imponen los futbolistas de poderío que no dejarán pintar a los artistas como ellos porque les prohibirán coger siquiera el pincel a fuerza de patadas, como hoy ya soportan, con la permisividad arbitral reinante.

Actualmente vemos todavía que, a pesar de esta dictadura de lo físico, Modric y Kroos regatean cuando pueden la presión de los adversarios y llevan la batuta del fútbol. El desgaste biológico se suma a esa consideración de ser los últimos mohicanos de un estilo de fútbol que no volverá. Por eso, contra todos esos criterios, Florentino Pérez le ha hecho ver a Kroos que aún puede rendir al máximo nivel más tiempo. El alemán piensa que todavía puede ser importante y sellará un contrato por un año.

Su clase le permitiría continuar en el primer nivel del fútbol incluso dos o tres años, pero el centrocampista quiere retirarse en buenas condiciones competitivas y nunca permitirá cerrar su legendaria carrera siendo segundo plato y dejando una última imagen de ocaso. Lo mismo piensan Modric y Benzema. La foto de Zidane retirándose en 2006 cuando aún podía ser importante es un buen ejemplo. Toni, como Zizou, quiere ser protagonista hasta el final en el campo y si no puede serlo se retirará. Va a firmar su continuidad por una campaña más con esta premisa.

El error y la envidia del Bayern

Kroos es un estilete de clavado en el orgullo del Bayern de Múnich. El error de toda la dirección deportiva muniquesa fue enorme. Le cambiaron de posición mil veces, le sentaron en el banquillo y nunca creyeron en él. Dejaron escapar un futbolista que ha hecho su gran carrera en el Real Madrid. Es el alemán que más Champions ha ganado en la historia, cinco, pero cuatro las ha conquistado en el conjunto blanco.

Guardiola, que vio sus condiciones y posibilidades, quiso retener a Kroos cuando llegó al Bayern, pero era tarde. El maltrato venía de antes.

Kroos es un referente del éxito de un alemán en el extranjero y lo ha hecho en el equipo que más obsesiona al fútbol alemán y especialmente al Bayern. En Alemania duele y molesta equivocarse así.

El enclave de la transición

El hombre tranquilo, el futbolista que nunca pierde la calma, continuará una temporada más con su raya marcada y su pelo rubio peinado, sin que los contrarios le puedan despeinar a fuerza de patadas. El Real Madrid lleva a cabo una transición del equipo campeón por la lógica ley de la edad y Kroos es el enganche y el enclave que une la veterinaria con la modernidad.

Camavinga, Tchouaméni y Valverde son el futuro hecho presente y Toni es el grito que transmite su sabiduría boca a boca a los jóvenes, como los sabios africanos hacen desde varias centurias atrás, sin nada escrito. Todo se aprende verbalmente y viéndolo en el campo. Es el último sabio de una estirpe que desaparece.

Descansará más

Su descarte en el encuentro de Cádiz para estar descansado frente al Chelsea es el ejemplo de la política de futuro que el entrenador mantendrá con el mediocampista teutón. Le concederá asueto antes de los partidos importantes, porque no puede mantener un alto nivel jugando cada tres días durante un mes, como ha sucedido ahora con el maratón de duelos de Copa y de Champions ante el Barcelona y el Chelsea.

Toni constata que sigue jugando y esa es la clave. Ese rol, con mayor descanso, es idóneo para rendir a un nivel muy alto una temporada más. El rubio que ciega los ojos cuando el sol pega en su cabeza seguirá paseando su leyenda por el Bernabéu. No sólo es el alemán más destacado de la historia del Real Madrid, por encima de Stielike, sino que es uno de los extranjeros legendarios de la épica blanca. Y lo mejor es que es una leyenda viva. Ser legendario y continuar en activo es una de las situaciones más gloriosas que puede vivir un futbolista. Y eso, objetivamente, solo puede ocurrir en el Real Madrid.