Berlusconi, el arquitecto del mejor Milan de la historia y coleccionista de Copas de Europa

Silvio Berlusconi siempre tendrá un nombre en la historia del fútbol. El expresidente italiano, que ha fallecido este lunes a la edad de 86 años, construyó el mejor Milan de la historia, un equipo que bordó el fútbol y que marcó una época.

Arquitecto del club de su ciudad natal, Berlusconi hizo que el Milan sea hoy el segundo equipo con más Copas de Europa (siete) y un equipo con una colección de títulos enorme. Lo hizo a su estilo, con su personalidad arrolladora y a la vez que dirigía a nivel político Italia. En los tres periodos que Berlusconi estuvo al frente del gobierno (1994-1995, 2001-2006 y 2008-2011) fue también presidente del Milan.

El paso de Silvio por el equipo rossoneri de la ciudad de Milán fue muy exitoso. Bien es verdad que estuvo 31 años y tiempo le dio para hacer grandes cosas, pero ni los que le precedieron ni los que vinieron después han logrado acercarse a lo que construyó el entonces empresario cuando compró el club en 1986.

Todo amante al fútbol tendrá en su retira el Milan de Arrigo Sacchi, ese que ganó dos Copas de Europa consecutivas en 1989 y 1990. Fueron los tiempos de goleadas al Real Madrid de la Quinta del Buitre, de un fútbol diferente, novedoso en un deporte muy diferente al que tenemos hoy.

Fue también ese Milan el que ganó en 1994 otra Copa de Europa (ya la primera con la denominación Champions) con Fabio Capello en el banquillo y goleando al Barça de Cruyff. Ese Milan finiquitó al famoso 'Dream Team' culé. Pero hubo mucho más.

Con Berlusconi en la propiedad, con muchos millones invertidos, el Milan ganó 29 títulos. Tiene el club italiano 53 en total, por lo que más de la mitad vienen de la época del expresidente italiano, que duró desde 1986 a 2012.

Siempre acompañado por su eterno número 2, un Adriano Galliani que era el que se peleaba con clubes y representantes para construir ese Milan, con Berlusconi se vieron grandes de las noches europeas que ha habido en la historia del fútbol.

Y es que tras una época de cambio y renovación, Berlusconi consiguió volver a ser grande a inicios del presente siglo. Ganó otras dos Copas de Europa ya con Carlo Ancelotti en el banquillo: la de 2003 y la de 2007. Entre medias se quedó la de 2005, famosa por la remontada que el Liverpool le hizo al Milan en Estambul. Así, de las siete Copas de Europa que tiene el club lombardo cinco son bajo la dirección de Berlusconi.

Más allá de los títulos, que fueron muchos (tres Mundiales de Clubes, cinco Supercopas de Europa, ocho ligas, una Copa de Italia y siete Supercopas de Italia), Silvio dejó un sello inolvidable en el fútbol por la fuerza que tenía su personaje, por como construyó ese Milan que reinaba en el mundo. Con él se vieron a jugadores inolvidables, historia de este deporte. Hablamos de Baresi, Costacurta, Maldini, Rijkaard, Ancelotti, Van Basten, Gullit, Dida, Nesta, Gattuso, Pirlo, Seedorf, Shevechenko, Inzagui, Kaká... y algunos nos dejaremos.

Cuando oficialmente vendió al Milan en 2017 no quiso dejar de estar en las entrañas del fútbol italiano, que cambió por completo. Unos años después replicó en menor medida este modelo de negocio futbolístico en el Monza –ciudad muy cerca de Milán–, al que el año pasado subió por primera vez a la Serie A, primera división italiana.