España tiene que ganar dos veces a Suiza para pasar a las semifinales del Europeo Sub-21

España lo ha conseguido, pero ha sufrido de lo lindo. La Selección sub-21 ha tenido que ganar dos veces a Suiza para clasificarse para las semifinales y eso ha sido posible gracias a los goles de Sergio Gómez y Juan Miranda. Además, esta victoria tiene doble mérito, ya que los de Santi Denia se han clasificado para los Juegos Olímpicos de París 2024, un premio importantísimo para esta generación de chavales.

Las dos selecciones se jugaban pasar a las semifinales del Europeo sub-21. Y en un partido de este calibre, lógicamente, la intensidad y el ansia de victoria estaban ahí. Suiza salió algo más enchufada y no tardó nada en asomarse a la portería defendida por Arnau Tenas. La primera ocasión helvética llevó la firma del delantero Amdouni.

Poco a poco, la selección fue frenando los ataques suizos y se hizo con el control del partido a través de la posesión de balón, sin duda alguna la seña de identidad del combinado dirigido por Santi Denia. En los primeros diez minutos de la primera parte se produjeron las dos primeras llegadas de la roja. Primero fue Rodri, que se sacó un buen disparo que fue detenido por Saipi y luego fue Álex Baena, pero el centrocampista tiró con miedo y el esférico fue directo a las manos del guardameta suizo.

España perdió progresivamente el control del partido y los suizos aprovechaban los contraataques para intimidar a la defensa española. Eso no le gustó nada a Santi Denia y se veía al técnico albaceteño muy incómodo en el área técnica.

Pasado el mal momento español, Antonio Blanco se echó el equipo a la espalda y fue filtrando balones a Juan Miranda, que a la mínima lanzaba la contra para intentar centrar por banda izquierda. Ese intento del lateral bético animó al equipo, que volvió a asediar la portería de Saipi.

La ocasión más clara de la primera parte llegó en el minuto 38. Sergio Gómez aprovechó una pérdida de Suiza y se plantó solo ante Saipi, pero el extremo catalán dudó hasta el final y la defensa helvética sacó bajo palos su disparo. En la siguiente jugada, Suiza reaccionó y Rieder se sacó de la manga un buen disparo que se marchó desviada por el lateral de la red de la portería de Arnau Tenas.

Una selección mucho más dinámica

Tras el paso por los vestuarios, los pupilos de Santi Denia salieron al césped del Superbet Arena de Bucarest mucho más enchufados. Los jugadores españoles empezaron a movilizar más el balón para intentar someter a la defensa helvética y meterla atrás.

La versión de la selección en la segunda mitad nada tuvo que ver con la de la primera. Los chavales empezaron a jugar con más fluidez para intentar encontrar fisuras interiores. España lo siguió intentando y el premio del gol llegó en el minuto 67. Sergio Gómez recibió un gran pase de Abel Ruiz y el extremo de Badalona pilló con el pie cambiado a Saipi para marcar el 1-0. Gol importantísimo para la selección.

El gol español animó a los suizos. Rahmen quiso dinamitar el partido con la entrada de Bares y Stojilkovic y la realidad es que le salió bastante bien. Sus pupilos se activaron y fueron en tromba para atacar la portería de Arnau Tenas.

Los helvéticos estaban amenazando y en el fatídico minuto 90, Amdouni aprovechó un despiste de la zaga española para anotar el gol del empate cuando todo parecía cerrado. Un jarro de agua fría para los españoles.

Cabeza alta y a seguir

Cuando te marcan un gol en el minuto 90 lo que no hay que hacer es venirse abajo. Y Santi Denia sabe muy bien cómo gestionar un mazazo de este estilo. Pero, como es lógico, el gol volvió a animar a los suizos, que en los primeros compases de la prórroga se hicieron con la posesión del balón.

Los diez minutos iniciales de la primera parte de la prórroga fueron suizos. Y España sabía que no le podía dejar ni un resquicio a una selección tan peligrosa. Y en el minuto 103 llegó el segundo gol para la selección. Juan Miranda se sacó un zurdazo desde el borde del área para sorprender a Saipi.

Barrenetxea y Gabri Veiga le dieron otro aire a la Selección y aprovecharon esos huecos que dejaron los defensores helvéticos. Y el propio Veiga gozó de una buena ocasión para hacer el 3-1, pero el disparo del de Porriño se fue rozando el palo.

El segundo gol español desmoralizó a los suizos. El cansancio tampoco ayudaba y las imprecisiones empezaron a aparecer. No hubo tiempo para más. La Selección Española estará en semifinales y espera rival, que saldrá del Francia vs Ucrania de este domingo a las 21.00.