Bellingham, el nuevo motor del Real Madrid: un futbolista único llamado a ser una leyenda

La pretemporada del Real Madrid ha comenzado de la forma más ilusionante posible. El equipo liderado por Carlo Ancelotti lleva ya dos encuentros, ambos se saldaron con victoria, pero lo más destacado son las grandes sensaciones que ha dejado. Serios en defensa –sobre todo en el segundo partido– y sacando una gran versión ofensiva liderada por Jude Bellingham, que no ha tardado nada en adaptarse.

El centrocampista inglés está actuando de enganche entre los delanteros y los mediocentros y está resultando ser la pieza ofensiva que necesitaba el conjunto blanco para funcionar en ataque. Su facilidad para entrar en contacto con la pelota y no tener ningún miedo a asumir un papel protagonista le ha valido para estrenarse como goleador, destapando así una de las virtudes que hizo al Madrid lanzarse a por su fichaje.

103 millones de euros fue lo que desembolsó el club presidido por Florentino Pérez para hacerse con un jugador que puede terminar resultado barato. El Real Madrid es otro con él en el terreno de juego y recuerda mucho a Zinedine Zidane, uno de sus ídolos y del que guarda muy buen recuerdo la afición madridista tanto de jugador como de entrenador.

Su llegada de segunda línea y su físico portentoso son dos de las cosas que más se valoran en el fútbol moderno. Cada vez son menos los jugadores que se atreven a tirar de lejos y Bellingham en cambio no tiene ninguna duda a la hora de armar la pierna desde lejos y probar fortuna. Esto característica es clave para desatascar partidos cerrados, algo que el conjunto de Ancelotti corría el riesgo de perder tras la marcha de Asensio.

Sin tiempo de adaptación

Más allá de todo lo que puede terminar aportando, la realidad es que Bellingham está ya adaptado al equipo. Sus compañeros lo han recibido con los brazos abiertos y están haciendo todo lo posible para que la calidad del inglés salga a pasear en cada partido.

Todos en el Real Madrid se han puesto manos a la obra para que brille el fútbol de Jude. El 4-3-1-2 le favorece, ya que tiene libertad para recibir y llegar y está algo liberado de tareas defensivas, aunque también cumple. Es lo que tiene contar con un físico prodigioso.

Ancelotti es consciente de que Bellingham tiene que ser uno de los encargados a liderar al Real Madrid y no ha tardado nada en encontrar el sistema, ya que si jugase con su tradicional 4-3-3, el inglés estaría más alejado de las posiciones de ataque y su juego se resentiría.

En cambio, de esta manera actúa como motor del equipo y el resto de jugadores lo saben. De hecho, se vio muy claro tras el gol ante el United, cuando todos salieron disparados a abrazarle y reconocerle su buena jugada. Un primer tanto que apunta a ser un aperitivo de lo que está por venir. Bellingham apunta maneras y solo falta por ver cómo se adapta a España, algo que históricamente les cuesta a los futbolistas ingleses.

Ni rastro de la lesión de rodilla

También preocupaba en el Real Madrid un poco el tema de su rodilla, que no olvidemos que le tuvo apartado en el tramo final de la temporada con el Borussia Dortmund, cuando los alemanes se estaban jugando la Bundesliga. Sin embargo, todo se ha curado según lo previsto y ahora únicamente juega con una cinta como medida de protección, pero sin ningún tipo de molestia.

Si nada se tuerce, el Real Madrid se ha hecho con uno de los grandes talentos de los próximos 15 años y que además cuenta con muchas cualidades para terminar convirtiéndose en una leyenda del club. Por el momento, parece haber entendido rápidamente lo que significa el equipo blanco y ya se antoja como un fijo para Ancelotti, que lo ha puesto de titular en las dos primeros partidos.

Todavía es pronto para poder saber hasta donde puede llegar Bellingham en el Real Madrid, aunque los primeros pasos dados apuntan a algo grande.