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Kylian Mbappé, en un entrenamiento con el PSG la pasada temporadaAFP

El PSG descarta a Mbappé en la liga francesa para que no se lesione a la espera del traspaso

  • El jugador no propondrá a su club la operación ni el Real Madrid hará oferta previa, tendrá que ser Al-Khelaifi quien proponga la transferencia

  • La casa blanca nunca se moverá hasta que llame el París Saint-Germain y si no hay comunicación lo fichará el próximo verano pagando 130 millones prima de fichaje al futbolista

Es un juego surrealista, un diálogo de besugos sin palabras. Fichan a Gonçalo Ramos y a Dembélé para suplir deportiva y ambientalmente la futura ausencia de la gran estrella pero no llaman al Real Madrid. Retiran la camiseta y todos los objetos que llevan el nombre de Kylian Mbappé de las tiendas oficiales pero no dan el primer paso de hablar con la casa blanca para negociar la transferencia.

Es una situación extraña, rara, increíble, ajena a la lógica. El París Saint-Germain no arriesgará con Mbappé y demuestra que no contará con él, pero no actúa. La figura mundial no jugará frente al Lorient la primera jornada francesa ni disputará las siguientes del mes de agosto, porque el equipo parisino lo reservará ante el temor de una lesión. Todos los movimientos invitan a un traspaso que es evidente y que la entidad que dirige Nasser Al-Khelaifi no quiere reconocer públicamente aunque todas sus actuaciones conllevan a ello.

El presidente del PSG habla de amenazas al dejar sentado al delantero, sin jugar, durante toda la pretemporada, pero la única razón de esta actuación es que no quiere que se lesione para conseguir los 200 millones que obtendrá por su marcha al Real Madrid.

El peligro de irse gratis

Es indignante que el emir de Qatar y el presidente del París Saint-Germain jueguen con el futbolista bajo críticas de pesetero y palabras amenazantes cuando el objetivo real es que no sufra una dolencia importante que impida el traspaso y que les obligue a quedarse con Mbappé la próxima temporada. Calculan el peligro de verle irse gratis dentro de diez meses sin recibir un euro.

Una lesión ósea o un problema físico grave que impidieran que Kylian compitiera durante medio año, por ejemplo, frenaría la transferencia este verano y obligaría a que el jugador continuara en el PSG y cumpliera su contrato sin ser traspasado. Es el miedo que tiene Al-Khelaifi. Que el máximo goleador francés se vaya sin dejar en sus arcas los 200 millones con los que ya cuenta.

Ya gasta su traspaso

Hay que hablar muy claro. Los fichajes del portugués Ramos y del francés Dembélé se han realizado con un dinero que espera recibir del Real Madrid. Dos adquisiciones para el ataque que demuestran también que la institución parisina está sustituyendo su baja.

Todo el trabajo que realiza el París Saint-Germain este verano están enfocado a crear para Luis Enrique un equipo sin Mbappé. Falta la solución final. Y el dilema surrealista, de película del gran Buñuel, es que quien tiene más interés en el traspaso espera a que el comprador demuestre antes su deseo, su urgencia, y tire la primera piedra. Lo tiene crudo el dirigente árabe si espera eso.

El Real Madrid sigue esperando la llamada del PSG por MbappéPaula Andrade

Han pasado cuarenta días desde que Mbappé presentó la carta en la que decía que no continuaría hasta 2025 y que quedaría libre dentro de un año y el PSG no se ha movido para hacer el traspaso. Intentó por todas las formas renovarle, ofreciéndole 1.000 millones en un contrato por cuatro años y el futbolista lo rechazó.

También denegó Kylian los intentos unilaterales de Al-Khelaifi de traspasarle a Arabia Saudí, al Liverpool o al Chelsea, con tal de no dejarle marchar al Real Madrid. Le hablaron de propuestas de 700 millones anuales llegadas desde Arabia y de 300 millones de traspaso para el París Saint-Germain procedentes de la Premier. Sin embargo, el Chelsea demostró que era todo mentira al manifestar que nunca se ha interesado por el francés. Y Kloop contestó con mucha elegancia que el Liverpool tampoco ha realizado ninguna proposición.

Al-Khelaifi: o Real Madrid o gratis

Fayza Lamari y su hijo han seguido el manual para conseguir la transferencia y han rechazado todas las ofertas que el PSG le ha hecho o se ha inventado. El Liverpool y el Chelsea eran los primeros que sabían que Mbappé solo quiere irse al Real Madrid. Es lo que más le duele al emir y al presidente del equipo que concita a todos los árabes en Francia.

Nasser Al-Khelaifi observa cómo el futbolista sigue todos los pasos para forzar la operación con el único club en el que quiere jugar. Es el Real Madrid o nada. Es el Real Madrid ahora o su marcha gratis en 10 meses. Al emir de Qatar le cuesta digerir que el futbolista tiene poder de decisión y que ya no se vende ni se compra solo por dinero. Al-Khelaifi se siente muy presionado por un emir que está acostumbrado a conseguir y hacer lo quiere.

Falta que Al-Khelaifi tenga los reaños de decirle a su emir que la única realidad es que hay traspasarle al Real Madrid y hay que hacer el movimiento ya. Les duele, pero es la única decisión posible, la única solución.

El presidente del PSG no se lo ha dicho claramente al dueño de la entidad y es la hora de hacerlo para atacar la operación obligada. Ha sido muy valiente para criticar a Mbappé de pesetero pero muy cobarde para no acudir al propietario del club desde primer día y decirle que la única salida es transferirle al Real Madrid ya.

El Madrid no entra al trapo

El Real Madrid observa todos estos toros afilados desde la barrera, sin salir a la plaza, porque quien tiene que torear en el medio del ruedo y arriesgarse es Nasser Al-Khelaifi.

El PSG ha contratado al agente internacional Kia Joorabchian para atacar la operación solo cuando le digan. Cuando le den luz verde. Públicamente esperan a que el Real Madrid saque la patita y ejecute primer salto, pero el club español no entra el trapo. No le engañan, no cuela.

Kia Joorabchian contacta con Faiza Lamari constantemente y está harto de decirle al presidente del PSG que hay que mover el primer peón para jugar de una vez la partida. Que la casa blanca no pica.

El intermediario iraní trabaja desde hace días y tiene todo planificado a la espera de la decisión de Al-Khelaifi y atacar por fin el traspaso moviendo la primera pieza.

El Real Madrid espera con la tranquilidad de saber que Mbappé vendrá este mes de agosto o en el siguiente mes de julio. El jugador tiene claro que su sitio estará en el Bernabéu. La cúpula de la casa blanca le fichará ahora si los árabes reconocen que la urgencia es suya y que son los primeros que tienen que llamar.

130 millones de prima el año que viene

Si el PSG pervive con el orgullo y la soberbia de no telefonear a la casa blanca, menosprecio que que ya tuvo hace dos años, la entidad madridista sabe que lo tendrá más barato el próximo año.

Al Real Madrid le saldrá más económico traerlo con carta de libertad en diez meses porque pagará 130 millones de prima de fichaje a la familia y ya está. Y ni un euro al París Saint-Germain, cosa que gustaría mucho, la verdad.

Si Al-Khelaifi, o Kia Joorabchian, se comunican ahora oficialmente con el equipo español para alcanzar un acuerdo, el precio rondará los 200 millones. Al-Khelaifi decide.

El futbolista y el Real Madrid tiene la sartén por el mango y eso no lo soportan los árabes del PSG. Pueden atrasar la operación todo el tiempo que quieran, pero si el 31 de agosto la estrella sigue en la entidad parisina le tendrán que pagar otros 40 millones netos de prima de fidelidad. La prepotencia les está saliendo muy cara.