Laporte inaugura el nuevo escenario en el fútbol: titular con la selección a pesar de jugar en Arabia Saudí

Aymeric Laporte (Agen, Francia; 1994) va camino de convertirse en un central 'histórico' para la selección española. El hispano-francés, actualmente en el Al-Nassr de Arabia Saudí, decidió nacionalizarse español y renunció a jugar con Francia, su país de nacimiento, después de no conseguir debutar con el conjunto galo, ya que Didier Deschamps no le veía de titular.

Laporte consiguió jugar con España gracias a la insistencia de Luis Enrique. El técnico gijonés consideró que el excentral del Manchester City le podía dar algo que ni Pau Torres ni Eric García le estaban dando y apostó por él. Y la apuesta le salió francamente bien al asturiano, ya que Laporte se convirtió en un fijo en la parte izquierda de la zaga y le dio al combinado nacional esa fluidez en salida de balón.

Laporte se nacionalizó español en mayo de 2021 y desde entonces ya ha sumado 21 internacionalidades con la camiseta de España y se ha consolidado como un central de garantías para la selección, algo que venía faltando desde que Carles Puyol, Gerard Piqué y Sergio Ramos decidieron poner punto y final a su carrera deportivo en términos de selección.

Con la salida de Luis Enrique, la presencia de Laporte se convirtió en una incógnita. Luis de la Fuente tomó el relevo como seleccionador nacional y se desconocía si el riojano iba a seguir contando con el hispano-francés, ya que quería rejuvenecer a la roja y dotarla de un cambio generacional. Pero De la Fuente siguió contando con él.

Un cambio de paradigma

Este verano Laporte decidió cambiar de aires. Abandonó Mánchester y lo cambió por Arabia Saudí para unirse a las filas del Al-Nassr, el equipo de Cristiano Ronaldo, y seguir aumentando el nivel de competitividad de la liga saudí.

Pero, ¿qué tiene de noticioso este fichaje? Después de nacionalizarse español en mayo de 2021, Laporte se ha convertido en el primer jugador que va convocado con la selección española militando en Asia. Y muy pocos casos hay de futbolistas que son llamados por España cuando juegan en una liga menor, como es, por el momento, la saudí.

Lo que queda claro es que se ha inaugurado un cambio de paradigma en el fútbol español, en el que podrán ir convocados jugadores que no juegan en Europa. ¿Quién será el siguiente? El caso es que en otras selecciones ya está sucediendo: Leo Messi (Inter de Miami y Argentina), Cristiano Ronaldo (Al-Nassr y Portugal) y Sadio Mané (Al-Nassr y Senegal) son un buen ejemplo de ello.

El dinero por bandera

E fútbol ha cambiado. Cada vez son menos los futbolistas que deciden con el corazón –a excepción de Santi Cazorla (Real Oviedo) y Sergio Ramos (Sevilla)– y que prefieren ganar millones y jugar en ligas de menor recorrido que aspiran a convertirse en importantes a medio-largo plazo.

El caso más sonado ha sido el de Gabri Veiga. El centrocampista vigués rechazó ofertas de equipos europeos y, en los últimos días del mercado estival, dejó plantado al Nápoles y aceptó unirse a las filas del Al-Ahli. Y esto es algo preocupante para el fútbol español. Se debe claramente a la pérdida de prestigio de la liga, que debe de reaccionar cuanto antes si no quiere ir bajando escalones en la clasificación de las mejores competiciones del mundo.

Sin embargo, con Arabia Saudí pasa algo diferente. Si bien es una liga menor, sin tradición y fuerza futbolística, sí están llevando jugadores para hacer de su fútbol algo competitivo. No está siendo la típica liga de retiro como es hasta ahora China, Estados Unidos o países de Oriente Próximo. También fichan jugadores jóvenes para hacer de su liga una de las más potentes en un corto plazo.

El caso de Laporte es único. Juega en Arabia Saudí y es llamado por la selección española, en la que es titular. En el fútbol se tenía esa idea de que ir a Arabia era dar por hecha tu carrera, pero el fútbol ha cambiado y ahora ir allí no impide seguir en la élite a nivel de selecciones. Y Laporte abre ese camino: estar en Arabia no es incompatible con ir convocado con tu país.