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Iñaki, con Ghana; Nico, con España: los hermanos separados por países en el fútbol

El naufragio de Iñaki tras renunciar a España y el triunfo de Nico: las dos caras de los hermanos Williams

Mientras uno decidió jugar con Ghana, donde le abuchean, otro eligió a la selección española, siendo ya pieza clave en la nueva España de De la Fuente

Los hermanos Williams viven la cara y la cruz del fútbol de selecciones. Uno –Nico, el más joven– eligió España y todo es éxito y felicidad. El otro –Iñaki– renunció a la selección española para irse a Ghana y naufragó en el intento por destacar. Dos hermanos, dos países. A uno le va bien, al otro bastante mal.

Asentado ya en España, Nico Williams es la figura feliz de la familia en lo que al fútbol de selecciones se refiere. Los dos últimos partidos ante Georgia y Chipre le confirmaron como una de las grandes revelaciones de los últimos años. Puñal por banda, asistente de lujo, creador continuo de peligro, a Nico no hubo quien le paró y si frenó fue por las molestias físicas que sufrió antes del descanso del duelo ante Chipre.

Con pocas horas de diferencia, a Iñaki, el mayor de los hermanos, se le atragantaba el nuevo paso por Ghana. Después de ser abucheado en el anterior encuentro, en el de este martes ante Liberia ni siquiera jugó un minuto. No ha marcado ni un gol desde su cambio de selección y en el equipo africano no llega a convencer tras un año de su giro de nacionalidad futbolística.

Ambos futbolistas del Athletic, Nico es la cara e Iñaki la cruz. El pequeño supera ya al mayor. Y lo hace por acierto en sus decisiones. El Williams que juega para España pudo ir a Ghana al ver la competencia que hay en nuestra selección, pero prefirió la exigencia y el alto nivel. Fue de lo poco salvable de España en el Mundial de Qatar y con Luis de la Fuente es ya fijo en todas las convocatorias.

Su hermano Iñaki decidió hace algo más de un año que era el turno de jugar con Ghana. De repente y tras ya llevar una década en el fútbol profesional quiso «encontrarse» con sus «raíces». No se le ocurrió esta idea en los años anteriores cuando estaba a mejor nivel e incluso jugó con la selección española. Se cambió de país (deportivamente hablando) cuando vio que ya no tenía opciones con España porque su nivel no daba ya para ello.

Los hermanos Williams, en una imagen previa al Mundial de QatarTwitter

Ir con Ghana era a priori un win win para Iñaki Williams. Jugaba un Mundial por primera vez en su carrera, torneo al que ya se había clasificado sin él. Era titular en Qatar y tenía un foco internacional. Pero renunciar a España le ha traído más disgustos que alegrías. El Mundial le vino muy grande y no solo no marcó ningún gol ni dio asistencias sino que fue protagonista del vídeo de highlights con fallos más notorios de la competición. Tuvo mala suerte, se resbaló solo ante el portero y la acción condenó a Ghana a la eliminación en la primera ronda.

Tras el Mundial tampoco ha destacado y los abucheos que le dedicó parte de la hinchada africana reflejan una línea fallida, la de Williams con Ghana, que directamente no funciona. Bien es verdad que era o Ghana o nadie porque en la selección española ya no le iban a llamar. La Copa de África, que se jugará a partir de enero de 2024, será su definitivo examen.

Frente a Iñaki y con ocho años menos emerge Nico, atado ya para España y que no podrá hacer lo que su hermano, cambiar de país. Él ya tendrá que jugar sí o sí y siempre para España. A día de hoy le va bien siendo uno de los jugadores desequilibrantes que protagonizan esta nueva España de De la Fuente, que se diferencia de las otras selecciones anteriores de que esta sí quiere más, tiene ganas de agradar y de disfrutar goleando.

En esa idea es clave Nico, al que una lesión frenó cuando estaba dando un recital de fútbol en Los Cármenes de Granada. La primera parte que protagonizó fue el definitivo consolidamiento de un jugador que creó dudas al inicio, pero que ahora ya es pilar clave para el futuro de España pensando en la Eurocopa 2024 y Mundial 2026. Pudo esperar a Ghana, pero prefirió dar su carrera deportiva a España. Su hermano se abrazó al país africano y lo que recibe, por ahora, son abucheos.