La selección femenina no tira: solo llena el 65% del aforo del estadio del Córdoba con entradas a 10 euros

La selección española femenina jugó este martes y en Córdoba su primer partido en España tras proclamarse campeona del mundo. Y si bien firmó la mejor asistencia de la historia de un partido de la selección en nuestro país, se quedó lejos del lleno en el estadio Nuevo Arcángel.

Dato oficial de espectadores que vieron la goleada de España a Suiza: 14.194 espectadores. Aforo del estadio Nuevo Arcángel de Córdoba: 21.822 espectadores. El campo tuvo así un aforo del 65% en este partido, lejos del lleno.

Si bien la cifra es muy buena no fue ni mucho menos un lleno en el estadio como se ha querido hacer ver desde el entorno de la selección se hable de lleno, especialmente de aquellos que defienden (de forma lícita) que el fútbol femenino interesa. Y claro que interesa, las audiencias y los aforos son cada vez más altos, pero conviene no exagerar ni manipular la realidad: en Córdoba no hubo un lleno y se quedó lejos de ello.

Y es una pena toda vez que este era el primer partido de la selección en España tras ganar el Mundial. Y las jugadoras ofrecieron el trofeo a la afición y merecían el reconocimiento del mayor número de aficionados. Fueron más de 14.000, el dato más alto en la historia de la selección, pero no fue un lleno. Al contrario, fue un pinchazo para tal y como estaban las expectativas. Y también con el asequible precio de las entradas: la más cara era 15 euros y las había por 10.

Cuando las jugadoras saltaron al terreno de juego, volvieron a reivindicar el mensaje de «Se acabó» y brindaron el título mundial a la afición en las dos tribunas principales del estadio andaluz había muchos asientos vacíos. Y durante todo el partido estuvieron los dos fondos tapados con lonas, sin que allí hubiera un solo aficionado.

La RFEF amplió hace unos días el aforo disponible del Nuevo Arcángel ante «la elevada demanda de entradas de la afición cordobesa», pero la clave era esa palabra, aforo «disponible». No era el aforo de todo el estadio, que no se abrió entero. ¿Por qué? No hay explicación oficial. Se supone que se vendió todo lo «disponible» aunque en esa zona «disponible» también hubo asientos vacíos.

Hubo muy buen ambiente, una afición entregada a unas jugadoras que se merecen todo el apoyo deportivo ante la hazaña conseguida, pero el partido se quedó muy lejos del lleno: 14.194 en un estadio de 21.822 asientos. Se puede justificar con que no se vendieron todas las entradas y no se podía llegar a esa cifra total (es verdad), pero si eso fue así, si no se vendieron todas las entradas, no fue porque el campo estuviera en obras sino porque ya se sabía que hacer el lleno (esos 21.822) era imposible.