Las opciones del Real Madrid para suplir la baja de Tchouaméni en el centro del campo

La victoria del Real Madrid en el clásico el pasado sábado en Montjuic, dejó una mala noticia para Carlo Ancelotti. Aurélien Tchouaméni se lesionó y estará dos meses aproximadamente de baja, por lo que, en principio, no volverá a jugar en este año 2023.

Al centrocampista francés se le diagnosticó una fractura por estrés incompleta en el segundo metatarsiano del pie izquierdo. Así, Tchouaméni, que venía de ser titular en la inmensa mayoría de los partidos del Real Madrid esta temporada, se perderá los tres duelos de Champions que quedan de la fase de grupos (ante Sporting de Braga, Nápoles y Union Berlín) y al menos siete partidos de Liga salvo que su recuperación sea más rápida de lo esperado (ante Rayo Vallecano, Valencia, Cádiz, Granada, Betis, Villarreal y Alavés).

Tchouaméni se ha convertido en un pilar fundamental para Ancelotti en la columna vertebral del equipo. Esta temporada ha jugado en todos los encuentros y ha sido titular en todos salvo en dos; el Braga, donde se le reservó para el Clásico y frente al Atlético de Madrid en Liga, el único partido que ha perdido el Real Madrid esta temporada. Casualidad o no.

La primera opción que maneja Ancelotti, y en principio, la más lógica, es colocar a Camavinga de mediocentro defensivo como cambio natural y seguir con Mendy de lateral izquierdo. El ex del Rennes estaba empezando a perder la titularidad, siendo el sacrificado en el centro del campo junto a Modrić. Eduardo ya ha jugado más veces en esa posición y ha cuajado buenos partidos. Su físico, su potencia, su pulmón y su capacidad de robar balones le convierten en el principal candidato para ocupar ese puesto.

La segunda posibilidad para Ancelotti es retrasar a Kroos al pivote defensivo y colocar a Camavinga o a Modrić de interiores junto a Valverde. El uruguayo es fijo para el entrenador por su polivalencia y resistencia mientras que el otro puesto en el centro del campo estaría disputado entre el francés y el croata. Camavinga partiría con ventaja puesto que Ancelotti ha dejado muy claro su apuesta y confianza por los jóvenes, dando menos protagonismo a Luka, que ya se quejó sobre los pocos minutos que estaba disputando esta temporada.

Con este esquema, el equipo ganaría en salida de balón, puesto que Kroos es la brújula del equipo y todo el juego pasa por el alemán. El problema sería en los partidos con más ritmo de juego. Kroos no tiene la resistencia de Camavinga y la capacidad de robo del francés. La edad pasa factura y el alemán no está para subir y bajar los 90 minutos de un partido.

La tercera opción para Carlo Ancelotti, y posiblemente la más remota, sería colocar a Camavinga y a Kroos de doble pivote y jugar con un esquema de 4-2-3-1. Está sería una alineación más ofensiva puesto que el Real Madrid jugaría con solo dos jugadores en el centro del campo, con Vinicuis por la izquierda, Bellingham de media punta y Rodrygo o Valverde por la derecha como falsos extremos. La posición de delantero centro sería para Joselu o Rodrygo.

Esta posibilidad es más improbable puesto que Ancelotti ha dejado muy claro cual es su sistema de juego con el 4-3-1-2, con Vini y Rodrygo arriba jugando con mucha libertad y Bellingham por detrás para potenciar su llegada a la portería rival. La figura de Tchouaméni es difícil de suplir puesto que había recuperado su gran nivel que ofreció a principios de la temporada pasada y que había perdido tras el parón del Mundial de Qatar.