El calvario con las lesiones de Pedri, el futbolista que paga la explotación de partidos del primer año
El jugador del Barça, llamado a liderar la selección española, sigue sin salir de la espiral de lesiones
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Pedri se ha vuelto a lesionar. El jugador del Barça sufrió molestias musculares en la pierna derecha tras recibir un golpe en uno de los entrenamientos del equipo culé y su año futbolístico acabó antes de tiempo.
El futbolista canario, que tiene tan solo 21 años, estará unos 20 días de baja (o más) y es duda para la Supercopa de España que se juega a mediados de enero en Arabia Saudí, un trofeo que puede marcar el futuro de Xavi Hernández.
Esta es otra lesión para el español esta temporada y que no termina de salir de la espiral de lesiones y contratiempos que ya arrastra desde hace tres años. Esta misma temporada, el jugador ya ha estado fuera casi tres meses por culpa de otra lesión muscular en el recto anterior del muslo derecho. Es algo preocupante.
En su primera temporada en el Barcelona Pedri lo jugó todo. Hasta unos niveles de asustar. Su físico, aparentemente escuálido, falto de musculación, aguantaba lo que se le echara encima, un año entero de competición, de agosto a agosto, sin romperse. En total, en esa temporada 2020/21, Pedri participó en Liga, Copa del Rey, Supercopa de España, Champions League, Eurocopa y Juegos Olímpicos.
Titular en todos ellos, aguantando las prórrogas, que España, en sus campañas en Eurocopa y Juegos Olímpicos, donde llegó a semifinal y final respectivamente, jugó multitud de ellas, con la carga física y emocional que supone. Y Pedri no se rompió en toda la temporada. 64 partidos en total, una cifra altísima, de jugar dos veces por semana, sin parar.
Y, sin embargo, en los dos cursos y medio siguientes, las dos temporadas anteriores y lo que llevamos de esta, las lesiones son la constante en la carrera de Pedri.
Comienzo de las lesiones
La temporada 2021/22 empezó de la peor manera para el futbolista. Entre problemas en el muslo y coronavirus, Pedri se perdió 39 partidos entre club y selección y estuvo un total de 166 días ausente. Jugó solo 12 partido de Liga.
La temporada pasada se volvió a perder 16 partidos con dos nuevas lesiones, de nuevo en el muslo, una en febrero y otra en mayo. Otros 96 días alejado de los terrenos de juegos y en momentos clave de la temporada. Desde abril hasta final de campaña sólo pudo jugar cinco partidos.
Este curso se esperaba que fuese diferente, de volver a ser posible la carga de partidos de la 20/21, pero, tras solo dos jornadas disputadas, de nuevo el maldito muslo derecho, le ha causado problemas. Desde el 20 de agosto hasta el 1 de noviembre que regresó, Pedri no ha jugado ningún partido. Más de dos meses ausente hasta que regresó en el partido contra la Real Sociedad.
Nueve partidos y mes y medio es lo que le ha durado a Pedri la alegría, que después de estar 64 días y 11 partidos ausente ha vuelto a caer lesionado. El calvario con las lesiones de Pedri no tiene fin y el futbolista ve frenada su proyección futbolística. No va con España desde el pasado Mundial de Qatar.
El cambio físico
En sus primeras temporadas, cuando lo jugaba todo sin lesiones, se decía que a Pedri le faltaba musculación, ganar fuerza, echar horas de gimnasio. Así que se puso a ello, echando músculo, cambiando su físico, volviéndose más grande y pesado. Y desde entonces las lesiones le persiguen, como una sombra.
Si por algo se caracteriza el fútbol del jugador canario es por su agilidad y flexibilidad, capacidad para girarse, de tener la pelota pegada al pie. Eso no ha cambiado, su fútbol sigue siendo el mismo, pero quizás su nuevo cuerpo no lo acepte, quizás su propia flexibilidad no la esté aceptando su nuevo cuerpo, más rígido.
Lo cierto es, que Pedri ha tenido un total de siete lesiones musculares en los últimos tres años y que se ha perdido un total de 60 partidos. 326 días sin poder jugar para ser exactos.
El calvario con las lesiones no cesa para el jugador español y es que de aquel que fue el mejor futbolista español, apenas queda un recuerdo de lo que podría haber sido y en lo que se está quedando.