Al-Khelaifi, presidente del PSG y opositor a la Superliga, quiso crear su Superliga acabando con las ligas nacionales

Nasser Al-Khelaifi, presidente del PSG y uno de los principales opositores al proyecto de Superliga, amenazó en 2020 con dejar la liga francesa para crear su propio proyecto de Superliga, que tenía la idea de ser más cerrado y con el objetivo de terminar con las ligas nacionales, algo que no pasa ahora con el presentado proyecto para el fútbol europeo que impulsa el Real Madrid.

Así se extrae de la documentación que han desvelado medios como L'Equipe y France Football, que han informado que el PSG estuvo muy cerca de crear su propia Superliga, contando con el apoyo de la Juventus de Andrea Agnelli, entonces presidente del club italiano y que sí apoyó la Superliga.

Al-Khelaifi tenía un plan muy avanzado para crear su peculiar Superliga a la que iba a llamar 'Bohr', en referencia al físico danés del siglo XX que trabajó en la bomba atómica. Y este proyecto, que se hacía muy al estilo de la Superliga que ahora impulsa el Real Madrid (y que también apoya el Barcelona), iba a ser todavía más cerrado que el que se presenta ahora con la Superliga.

En concreto, en el plan de Al-Khelaifi, ahora principal socio de Ceferin (presidente de la UEFA), se recogía abandonar la liga francesa, que ni jugaría. Y no solo eso: esa nueva competición, la 'Bohr', terminaría con las ligas nacionales. Los grandes clubes de Europa solo hubieran jugado entre ellos, en una competición de máximo nivel que sería en realidad una liga europea.

Lo más llamativo es que en la documentación a la que ha accedido L'Equipe y France Football el presidente del PSG defendía la creación de una nueva competición en el contexto de las pérdidas económicas que estaban sufriendo por la pandemia. Al-Khelaifi consideraba que hacía falta un cambio en el fútbol europeo, que es lo que ahora niega. El qatarí es el principal opositor a la Superliga.

Y cabe recordar que el proyecto de Superliga presentado indica claramente que no se acabaría con las ligas nacionales, que es lo que más se critica en este tipo de cambios en el fútbol. El Real Madrid, por poner un ejemplo, seguiría jugando la liga española los fines de semana. El cambio principal es que entre semana (martes y miércoles) en vez de jugar la Champions, que pertenece a la UEFA, se disputaría la Superliga, con todos los clubes siendo los organizadores, los propietarios de la competición.

Pese a eso, el PSG siempre se ha mostrado en contra, pero ahora se desvela que ellos tenían una idea de Superliga todavía mucho más cerrada. Cambió de opinión, principalmente porque no salió adelante su idea, y después se hizo gran opositor a proyectos como el que él quería al convertirse en presidente de la ECA (Asociación Europea de Clubes) y empezar a trabajar de forma directa con la UEFA.

Según informan los citados diarios, en esta Superliga denominada 'Bohr' iban a participar 24 equipos. De ellos 14 lo harían sin ningún mérito deportivo y sí económico: los que más ingresos tuvieran en los últimos años. Es decir, ni un solo mérito deportivo. Habría dos invitados, el Milan y el Olympique de Lyon y los ocho que completarían este torneo serían los equipos con más coeficiente en las competiciones europeas de los últimos años. Nada de ligas nacionales.