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La semifinal entre Athletic y Atlético se detuvo hasta en dos ocasionesAFP

¿Qué pasa con los infartos en los estadios españoles?

La creciente ola de paradas cardiacas afecta a los partidos de fútbol, que cada semana sufren detenciones

Por desgracia, los parones en los partidos de fútbol que se juegan en España, sea primera, segunda división o la Copa del Rey, por infartos, mareos o indisposiciones de aficionados en la grada son cada vez más comunes. En el encuentro de vuelta de semifinales de Copa entre el Athletic Club y el Atlético Madrid el partido se tuvo que detener hasta en dos ocasiones. En diciembre, un aficionado del Granada falleció en un partido ante el Athletic. Prácticamente cada semana ocurren casos así, con mejor o peor fortuna. En una jornada, en diciembre, entre primera y segunda hubo hasta siete detenciones.

En los estadios de fútbol, los nervios están a flor de piel. La emoción, la ansiedad incluso, son sentimientos que experimentan algunos aficionados que se desviven por su equipo. Y en momentos de máximo estrés, estos sentimientos pueden encontrar su reverso negativo y afectar a la salud.

«El protocolo siempre ha sido el mismo. El árbitro ha de parar el partido cuando considere que es lo más adecuado para solucionar una situación externa al juego. El protocolo que se está siguiendo este año es el mismo que el de las temporadas pasadas» asegura la Federación Española de Fútbol.

¿Por qué cada vez hay más?

Los estadios de fútbol, como grandes recintos que aglutinan a tanta gente, sirven de medidor de la salud general de la sociedad. Y los casos de infartos y afecciones cardiacas han aumentado tras la llegada del COVID a nuestras vidas. Cada día se registran unos 150 infartos en España. Y los campos de fútbol no se libran.

Pacientes de riesgo o con patologías cardiacas son los más vulnerables a estas situaciones. Y esto se manifiesta en la nueva realidad, con más infartos, debidos a la ausencia de controles o alertas previas, representados también en los estadios.

SportMarket realizó una encuesta en 2018 en la que extrajo el siguiente dato: el 67 % de los aficionados del mundo que van a los campos de fútbol son hombres. Siguen siendo el público mayoritario. Los infartos también separan según los datos: la incidencia es mayor en hombres que en mujeres. El perfil más marcado con línea roja para sufrir un infarto es un hombre de unos 60 años, fumador y que padezca sobrepeso y problemas de tensión.

Una vez se ha producido el problema, llega el momento de actuar. Ahí aparece la intervención de todas las personas especializadas en este tipo de labores, las cuales van desde los cuerpos médicos de los equipos participantes hasta los servicios sanitarios encargados del evento en cuestión. Una parte fundamental son los equipos de los que se dispone para intervenir. Para saber quién tiene que tomar la iniciativa hay una serie de códigos, pero por encima de todo está salvar una vida.