Brahim, seleccionado por Marruecos y maltratado por la Federación Española
El seleccionador marroquí mima al madridista mientras la FEF se está portando muy mal con el jugador: Luis de la Fuente no le ha llamado ni una vez para conocer sus sensaciones. Nada. Lamentable. España puede perder un gran jugador
La actuación y la actitud de Luis de la Fuente y de la Federación Española con Brahim Díaz es penosa. Decimos actuación de forma metafórica porque la Federación Española de Fútbol no ha protagonizado ni una sola acción para captar a Brahim para nuestra selección nacional. El comportamiento del seleccionador y del organigrama federativo no solo es lamentable, sino que peca de una ineptitud y sobre todo de una falta de inteligencia aterradoras en un ente tan importante para el balompié español. España puede perder a un gran jugador para su causa en beneficio de Marruecos, que hace precisamente todo lo contrario: mimar a Brahim.
Aquí la inteligencia la demuestran la Federación Marroquí y su seleccionador, Walid Regragui, que lleva medio año diciendo que Brahim debe ser el líder de su equipo nacional. Regragui, listo como nadie, ha convocado a Brahim para los partidos amistosos con Angola, el día 23, y Mauritania, tres fechas más tarde. Las comparaciones son odiosas, porque mientras tanto la Federación Española y Luis de la Fuente no han llamado ni una sola vez al futbolista para consultarle sus sensaciones y ganarle para el proyecto España.
La Federación Española, un cero a la izquierda
Marruecos se desvive por Brahim y la Federación Española sigue tumbada a la bartola, pensando quizá en la causa judicial contra su arbitraje sospechoso del BarçaGate y preocupada cada día más por unos colegiados ineptos.
La Federación demuestra ser un cero a la izquierda en su gestión. No hay que estudiar tres carreras para saber que Brahim tiene el mejor regate del fútbol español, que posee una potencia inusitada y una garra descomunal, como el Leipzig y el Valencia han comprobado. Brahim es quien aguantó el sábado los envites de los defensas en Mestalla, dio un giro y se sacó un centro perfecto que Bellingham cabeceó en el 2-3 que Gil Manzano anuló porque le dio la gana.
De la Fuente debió convocarle en noviembre y no lo hizo
Es la falta de trato la que lamenta Brahim. La falta de tacto de la Federación Española y de Luis de la Fuente frente a los mimos y conversaciones con la Federación Marroquí y con Regragui, el más listo de la clase, mucho más que De la Fuente.
Walid Regragui es ese entrenador calvo, fuerte, con barba, que llevó a Marruecos a la gloria en el Mundial de Qatar con un esquema de presión y contragolpe efectivos. Walid sí que va a la fuente del dilema y caza al jugador. Por el contrario, nuestro seleccionador no está ni se le espera.
Brahim se encuentra en la prelista de Luis de la Fuente para los partidos de España frente a Colombia y Brasil, que se disputan en los mismos días que los dos encuentros de Marruecos. Nuestro seleccionador ya debería haber captado a Brahim para su causa en noviembre, cuando el delantero esperaba la llamada tras demostrar en el Real Madrid su clase, su talento, su fuerza y su eficacia. Pero no. El técnico de nuestro equipo nacional seguía afectado por la crisis generada por la destitución de Rubiales y su posible cese como seleccionador. Fue mantenido en el cargo. Pero su dirección es desacertada y en este caso, lamentable.
Si España le llama, debe elegir entre las dos selecciones
De momento, Marruecos gana este combate a los puntos con claridad ¿Qué puede pasar? Puede pasar que la selección española también le convoque para estos dos encuentros ante Colombia y Brasil. Ya vamos tarde, a remolque de Regragui, que evidencia que un entrenador debe ser el mejor dentro y también fuera del campo, con sus charlas con los futbolistas.
Si De la Fuente mueve ficha por fin y le convoca, Brahim deberá elegir entre una y otra selección.
España gana la partida de la relevancia internacional de nuestro fútbol, aunque Marruecos nos eliminó en Qatar. Y La Federación Marroquí nos golea en comportamiento y trato al futbolista. Brahim decidirá. Pero no está contento con la actitud de La Federación Española y Luis de la Fuente.