Las mil vidas de Sergi Roberto y cómo vuelve a ser importante para el Barcelona
El canterano ha vuelto al equipo azulgrana y ofrece cosas que serán vitales para contener al equipo de Kylian Mbappé
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El escritor estadounidense John Steinbeck dedica unas cuantas páginas de su magnum opus Las Uvas de la Ira a narrar las peripecias de una tortuga que, entre coches que la chocan o personas que la agarran, sigue su camino, inmutable, hacia su destino. Como una metáfora de que la vida se abre camino y soporta los golpes. Que lo que está destinado a ser, será.
La tortuga del Fútbol Club Barcelona bien podría ser Sergi Roberto. El canterano ha tenido muchas vidas en su etapa en el club de su vida, muchas caídas en desgracia y también algún recuerdo eterno, como ese que gol que culminó la remontada ante el PSG en 2017. Con apenas unos pocos meses más de su contrato en vigencia, Sergi ha vuelto a encontrar la forma de ser importante para el Barça. Se le espera de titular en París.
La marcha de Sergio Busquets ha resultado en un grave problema para Xavi Hernández. Oriol Romeu no fue el sustituto que se esperaba, la constante movilidad de Frenkie de Jong en esa posición no acabó de ayudar al equipo y el subir a Andreas Christensen a esa siguiente línea también tuvo importantes peajes, como el poco protagonismo que asume con balón el futbolista danés. Sergi Roberto, sin ser un 10 en nada, sí es un 7 en muchas cosas. Y eso es lo que tanto está ayudando a Xavi.
Con Roberto en el mediocampo, apareciendo en la base de la jugada y dirigiendo las posesiones desde allí, el equipo está encontrando más y mejor a Ilkay Gündogan en las zonas donde el alemán más daño hace. Esto es, cerca del área. El equipo controla mejor sus propias posesiones, se precipita menos y, como consecuencia, el rival les corre mucho menos.
Sergi Roberto para parar a Mbappé
Que no se entienda mal. Parar a Kylian Mbappé no será una tarea para Sergi Roberto (sí para Ronald Araújo, en un duelo que promete ser apasionante), será un enfrentamiento que apenas se dará en el césped, pero un buen Sergi Roberto ayudará, y mucho, a contener a la estrella francesa.
Si el Barça está menos precipitado en sus posesiones, controla mejor los pases que da y el ritmo que les imprime, y pierde la pelota en mejores condiciones, el PSG tendrá más difícil encontrar situaciones en las que corra en ventaja a campo abierto. Esas situaciones en las que Mbappé más temible es. Con las que destrozó a la Real Sociedad en el cruce de octavos de final.
Desde que Xavi Hernández asumió el mando del Barcelona, empezada la temporada 2021/22, ha querido construir al equipo bajo unos mismos parámetros: un centro del campo que en fases con balón es de cuatro jugadores, dos en la base de la jugada, iniciando el juego, y dos (con uno de los extremos comportándose como centrocampista) en posiciones entrelíneas, buscando recibir a espaldas del mediocampo rival. Tres defensas para iniciar la jugada, dos hombres abiertos en las bandas y un delantero centro que fija a los centrales rivales completan al equipo.
Sergi, en la primera altura mediocampo, acompañado ya sea por De Jong o por Christensen (hay opciones de que sean estos dos los de la partida, relegando a Roberto al banquillo), permitiría a Gündogan ascender a la siguiente altura y ser un activo temible para el rival con sus llegadas al área.
Roberto desde luego que no es uno de los mejores jugadores de la plantilla, pero es el tipo de jugador que hace brillar el resto y se sacrifica por el bien del colectivo. Y en la eliminatoria ante los parisinos, el Barça va a necesitar mucho sacrificio para contener a los galgos franceses a campo abierto. Tortugas contra galgos en el Parque de los Príncipes.