Los próximos pasos de la RFEF y la tensa espera a la resolución del TAD

Los acontecimientos se suceden en el seno de la Federación Española de Fútbol y las partes implicadas aguardan, expectantes, a que se aclare un poco la situación. El último mes ha sido un verdadero terremoto que ha puesto a la Federación ante su espejo de corrupción. Desde los registros de la UCO, la detención de Luis Rubiales, las elecciones a la presidencia o la imputación del único candidato, Pedro Rocha.

Nadie sabe muy bien qué va a pasar ni cuáles van a ser los siguientes acontecimientos pero, mientras la tensa espera sigue su curso, asuntos tan urgentes como los inmediatos Juegos Olímpicos, el Mundial de fútbol de 2030, la incógnita del director deportivo o la final de la Champions femenina en Bilbao el mes que viene necesitan una Federación fuerte que allane y limpie el camino. Rocha, cuando entró a los juzgados como testigo y salió imputado, le declaró a la jueza que estaban haciendo mucho daño a la Federación porque «hay mucho en juego ahora mismo».

Todo eso ocurre, en segunda instancia, mientras se espera que el TAD se pronuncie sobre la inhabilitación que pesa sobre Rocha y la Comisión Gestora. O mientras se espera que la Comisión Directiva del CSD se reúna para estudiar el caso que pesa ahora mismo sobre la Federación y decida proceder en algún sentido. También está el asunto de la reclamación realizada por Miguel Galán respecto a la validez de los avales que Rocha presentó.

La antigua mano derecha de Rubiales expuso el pasado viernes que había logrado 107 avales de los 139 que componen la Asamblea. Un dato que le convierte en el único candidato a la presidencia. Si no se encuentran motivos para no dar validez a los avales, Rocha sería presentado presidente de manera inmediata.

Paralelamente a todo esto, y tal como anuncia MARCA, hasta nueve presidentes de las territoriales han enviado una carta al CSD reconociendo apartarse de la línea del candidato y ofreciéndose al Gobierno para colaborar. Son Javier Landeta (País Vasco), Kepa Arrieta (Álava), Manu Díaz (Guipúzcoa), Iñaki Gómez (Vizcaya), Paco Díez (Madrid), Marcelino Maté (Castilla y León), Pablo Burillo (Castilla - La Mancha), Salvador Gomar (Comunidad Valenciana) y Juan José Arencibia (Las Palmas).

Hace escasos días, el TAD expedientó a la Gestora de la Federación al considerar que se había extralimitado en sus funciones, tomando decisiones como la renovación del seleccionador nacional Luis de la Fuente. Esta respondió que era una cuestión de máxima urgencia, pues su contrato finalizaba a mitad de la Eurocopa del próximo verano.

Rocha rechazó en un comunicado la resolución del TAD, «en la que se le acusa de excederse en las funciones encomendadas en relación con una serie de decisiones» que, según afirma, «como presidente en funciones, se ha visto obligado a tomar por el bien del fútbol durante el periodo de tiempo en el que ha estado a cargo de la gestora, actuando en todo momento con total y absoluta transparencia».

Mientras tiene lugar esta guerra de declaraciones y reproches legales, el fútbol español necesita que alguien de un paso al frente y finalice con toda esta trama que está ensuciando la imagen y el presente de España a nivel futbolístico. Con el Mundial 2030 en el horizonte, la esperanza que no se estropee también el futuro.